Grandes nubes identificadas en la atmósfera de Júpiter por la nave "Juno" de la NASA están tan altas que son muy frías, y desprenden material helado hacia estratos inferiores del planeta gigante. Nuevas imágenes de la nave han revelado precipitación desde estas nubes blancas de aspecto esponjoso y unos 80 kilómetros de envergadura, que proyectan sus sombras comparativamente diminutas en las monstruosas cubiertas de nubes multicolores del planeta gigante.

"Está nevando en Júpiter, y estamos viendo cómo funciona. Es probablemente principalmente hielo de amoníaco, pero puede haber hielo de agua mezclado en él", afirma el investigador principal de Juno, Scott Bolton, del Southwest Research Institute en San Antonio.