El Real Jardín Botánico, en Madrid, acogió el pasado fin de semana un encuentro de trabajo entre técnicos y expertos en arboricultura y mantenimiento del arbolado urbano, con el objetivo de acabar con la "dispersión" que, según han explicado, existe a la hora de valorar el riesgo que supone el estado de los árboles en pueblos.

Una mala valoración consiste en que un mantenimiento inadecuado de los árboles puede acabar con el vuelco de un tronco o la caída de ramas que pueden resultar peligrosos.

La reunión, en la que han participado expertos de la Asociación Española de Arboricultura, de la Asociación Española de Parques y Jardines y la Fundació de la Jardineria i el Paisatge procedentes de todo el país, pretendía "unificar criterios y buscar unos estándares básicos en la evaluación de riesgo en arbolado urbano".