Nuria Pérez recomendó fomentar la autonomía en los hijos. "Si el niño llega a casa del cole y está todo preparado, el niño nunca va a demostrar qué es lo que le atrae, si lo observamos, vamos descubriendo" qué es lo que realmente le ilusiona. Para ello, no se debería atiborrar la agenda del pequeño. "Dejémosles ser niños y aburrirse porque es la clave para que surjan ideas y no seguir modas", aconsejó.

Pérez aclaró que esta propuesta no significa "abandonar a los niños con el bocadillo de Nutella frente a la tele", sino brindarles la oportunidad de entrar en contacto con adultos o jóvenes que realizan distintas actividades o profesiones. La idea es que charlen con ellos para saber poco a poco qué es lo que les interesaría desarrollar en su vida adulta, especialmente, los talentos artísticos.

Para esta coach, el papel de los padres es fundamental ya que la escuela de hoy en día sigue sin saber cómo preparar a los pequeños para la vida. "Es importante reconocer de una vez por todas -apuntó- que esta generación de niños no va a tener el sistema educativo que necesitan. El problema es que muy probablemente, si no es la próxima será la siguiente generación, sí van a disfrutar de un sistema educativo de otro tipo. Esos serán los que lleguen al trabajo cuando nuestros hijos lleven allí diez años. Eso es muy peligroso, me asusta, porque los otros van a estar mucho más preparados".

Subrayó que "lo que hacen nuestros hijos de nueve a cinco es inútil e innecesario. El otro día, mi hija estaba memorizando otra vez la muerte de Viriato, la batalla de Lepanto... ¿Cómo se examina a los niños aún de esto? Es una tristeza".