La Consellería de Cultura publicó ayer en el Diario Oficial de Galicia (DOG) la resolución por la que se incoa el procedimiento para declarar Bien de Interés Cultural, con la categoría de monumento, a la Cova de Eirós, situada en la parroquia de San Cristovo de Cancelo, en el tenérmelo municipal de Triacastela (Lugo). Las campañas arqueológicas realizadas con el apoyo de la Xunta en esta cavidad cárstica durante 1993 y en el periodo 2008-2016 descubrieron restos de osos de las cavernas y ocupaciones paleolíticas que abarcaban desde el Paleolítico medio hasta los momentos finales del Paleolítico superior e indicios de presencia de una serie de motivos y grabados en las paredes de la Gran Sala y en una de las galerías del interior de la cavidad.

De estos hallazgos se deduce el "excepcional valor científico y patrimonial de la Cova de Eirós", al "aglutinar un yacimiento paleontológico de gran interés en el fondo de la cueva con un yacimiento arqueológico con una dilatada secuencia de ocupación".

A esto se añade la localización del arte rupestre prehistórico, el primero de este tipo conocido en Galicia. Aunque se producen hallazgos arqueológicos a lo largo de toda la cueva, la principal concentración se da en su boca, donde se constatan ocupaciones del paleolítico medio y superior, prehistoria reciente y medieval.