El Hospital Vall d'Hebron de Barcelona ha operado con éxito en las últimas semanas a dos bebés de unos 1,5 kilos de peso mediante cirugía laparoscópica, una técnica mínimamente invasiva que se quiere aplicar en el 70 % de las cerca de 2.000 cirugías que se realizan cada año en este centro.

Esta apuesta por la cirugía laparoscópica en pediatría de Vall d'Hebron se ha reforzado con el fichaje, hace unos seis meses, del doctor Manuel López, nuevo jefe de Cirugía Pediátrica, graduado en la Universidad Libre de Colombia y formado también en Montpellier (Francia).

Los miembros del equipo de López en Vall d'Hebron han intervenido con laparoscopia en las últimas semanas a un bebé recién nacido con 1,5 kilos de peso que padecía atresia de esófago, una lesión congénita que afecta a este órgano y que puede derivar en lesiones pulmonares, y a otro pequeño que pesaba sólo 1,6 kilos al que se sometió a una reparación de una hernia diafragmática, con incisiones de apenas dos o tres milímetros.

Manuel López explica que su objetivo es operar al máximo número de niños con esta técnica mínimamente invasiva, de la que se celebró ayer en Vall d'Hebron un curso especializado dirigido a cirujanos pediátricos y que cuenta con el reconocimiento de las asociaciones internacional y europea en cirugía endoscópica pediátrica.

Estas dos organizaciones son la International Pediatric Endosurgery Group (IPEG), cuyo presidente, David van der Zee, asistió al curso del hospital barcelonés, y la European Society of Paediatric Endoscopic Surgeons.

Manuel López explicó que Vall d'Hebron ha apostado por este tipo de cirugía mínimamente invasiva "para beneficiar al mayor número de pacientes pediátricos y con el objetivo de que el servicio tenga el reconocimiento nacional e internacional" que merece.

La laparoscopia no es una técnica nueva, ya que se aplica desde los años 90 en cirugía de adultos y, de hecho, se estudia en todas las facultades de Medicina, pero lo que se busca ahora es que se beneficien de la misma el máximo número posible de niños enfermos, incluso los que tienen poco peso.

Esta técnica permite evitar incisiones y reduce el postoperatorio de los pacientes, así como las posibles complicaciones que, en el caso de los niños, puede ahorrar incluso nuevas intervenciones en el futuro, según el hospital.

Vall d'Hebron es, también, pionero en las técnicas de fetoscopia, que permiten operar al feto en el vientre materno, y el doctor López asegura que las técnicas laparoscópicas en fetos que se utilizan "están al mismo nivel de los grandes centros del mundo".

Pero para conseguir mantener y aumentar este alto nivel, la formación es esencial y ese es el objetivo del curso "European Symposium and Hands On Course i Pediatric, Neonatal and Fetal MIS". Los asistentes al curso conocerán las experiencias de algunos de los expertos más destacados del mundo en cirugía y tratamientos mínimamente invasivos, y los diversos métodos de simulación creados para estudiar los casos clínicos antes de llevarlos al quirófano.

Entre estos expertos, se encuentran el doctor Steve Rothenberg, del hospital pediátrico Rocky Mountain de Denver y la doctora María Marcela Bailez, de Argentina, expresidenta del IPEG, quien apuntó que "la misión de los cirujanos es que estas técnicas lleguen a todos los niños".