Dominic Gagnon es un cineasta que innova e incomoda y su trabajo ha sido censurado en varios festivales de cine. De origen franco-canadiense, Dominic llega a Galicia como invitado especial de la decimotercera edición de Play-Doc que se celebra en Tui. En este festival de cine documental se proyectarán cinco de sus películas, creadas con material que recoge de Internet. Los vídeos realizados por aficionados en la era de las nuevas tecnologías es la base, a través de la cual Dominic Gagnon construye su obra.
-Eres el invitado especial de esta edición de Play-Doc, ¿con qué se van a encontrar los espectadores que acudan al festival para visualizar tus películas?
-Algunos van a salir aterrorizados y otros encantados. Mis películas ayudan a intentar comprender el mundo en el que vivimos, en la era de Internet. Pretenden cuestionar la era digital y la forma en la que nosotros mismos como sociedad nos retratamos en la web. Se puede decir que en estos momentos es la era de los documentales en Internet, documentales que se ruedan sin cámara.
-Hay quien defiende tu trabajo como innovador y perturbador. ¿Cuánto hay de verdad en esas dos descripciones?
-Innovador no, ya en 2007 aprendí lo que estoy haciendo ahora de un niño de diez años. Es muy habitual la reutilización de material de Internet; lo que sí es una novedad es llevarlo al cine, porque así se convierte en una experiencia grupal, y por lo tanto el público decide qué quiere ver. En cuanto a perturbador, mucha gente considera mi trabajo gracioso. Depende de los espectadores. Me hace mucha ilusión que mis películas susciten reacciones tan opuestas, hay gente a la que le gusta, gente a la que no y otros a los que le horroriza.
-¿Cómo surge la idea de centrar tu trabajo en material extraído de Internet?
-Surge para utilizar la "ecología digital". Creo que hay demasiadas imágenes en Internet, así que yo lo que hago es editarlas y buscarle un sentido a estas imágenes que ya existen. No estoy en contra de la concepción tradicional del cine pero considero que esta forma de ver el mundo también es muy interesante, las personas que salen en mis películas se dirigen directamente a la cámara. Yo lo llamo un cine hiperdirecto porque es un cine que está mucho más próximo a la realidad. Me gusta ver mi trabajo como un agricultor que no cultiva, sino que recoge frutos.
-¿Qué quieres transmitir y reflejar en tus películas?
-Quiero encontrar información sobre la vida. Cuando empecé a trabajar sobre esto eran solamente un experimento, pero con el tiempo se convirtieron en domumentale.s Documentan la realidad. Youtube en ocasiones funciona como una especie de bola de cristal que te permite predecir lo que va a suceder.
-¿Puede que estemos ante un importante cambio en la forma de abordar el cine documental?
--Por supuesto. En los años noventa se decía que el cine estaba muerto y yo creía que era una gran verdad, pero cuando matas algo tienes un cadáver y en este caso yo no encontraba dónde estaba el cadáver del cine. Luego me dí cuenta que el cadáver del cine no se podía encontrar porque estaba desmembrado y el cine se diluía en nuestra vida diaria. El cine está en todas partes, así que lo que hice fue coger todas las partes del cine y unirlas todas juntas, una especie de Frankenstein del cine, que en apariencia es cine pero que viene de otras fuentes.
