Los juzgados gallegos recibieron un total de 5.683 denuncias por violencia de género durante el pasado año, lo que supone una media de 15 diarias y un aumento del 9% respecto al 2015 cuando se presentaron 5.210 demandas. Pese a estas cifras, Galicia es la tercera comunidad con menor ratio de víctimas de maltrato por cada 10.000 mujeres (36,2), una tasa que sólo es inferior en Castilla y León (34,8) y La Rioja (27,7), según el balance del año 2016 que publicó ayer el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, organismo dependiente del Consejo General del Poder Judicial.
Las casi 5.700 denuncias en Galicia suponen la cifra más alta de los últimos siete años ya que para encontrar más demandas contra maltratadores hay que remontarse al año 2009 cuando se registraron 6.068. Una evolución similar a la que se experimentó a nivel nacional, donde las 142.893 denuncias presentadas durante el pasado año -un 10% más que en 2015- supone la mayor cifra de la década. "El que haya más denuncias, dentro de que nos preocupa, nos parece que es el síntoma correcto; la sensibilización a denunciar, no solo de la persona atacada, sino de los que conozcan el caso, es la manera de acabar con esa lacra", señalaba ayer el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo.
En el caso de Galicia, ocho de cada diez denuncias fueron presentadas por la propia víctima aunque, eso sí, la mayoría de las veces cuando se levanta un atestado policial. Un total de 4.303 se animaron a denunciar a su agresor después de que los agentes levantase atestado, frente a las 426 que presentaron la denuncia por propia iniaciativa. en otros 341 fueron los propios policías los que demandaron al agresor y son los familiares los más reacios a denunciar lo que ocurre. Sólo ocho acudieron a un juzgado para alertar de lo que le ocurría a la víctima y un centenar sí se decidió a denunciar tras el atestado policial. Por provincias, Pontevedra es la que concentra un mayor número de denuncias: 2.210 durante el pasado año (una media de seis al día), el 38% del total en la comunidad gallega. Le sigue con unos datos similares A Coruña (2.193), Lugo (691) y Ourense (589).
La estadística del Poder Judicial diferencia entre el número de denuncias y la cifra de mujeres que son consideradas víctimas de maltrato tras pruebas que lo demuestren. En ese caso Pontevedra es la que cuenta con un mayor número de maltratadas (2.150), seguida de A Coruña (1.696), Lugo (671) y Ourense (587). Unas cifras que, sin embargo, sitúan a Galicia a la cola del país en ratio de maltratadas por número de habitantes. La comunidad gallega registra 36,2 víctima por cada 10.000 mujeres,la tercera más baja del país y muy por debajo de la media estatal que se sitúa en 56,7. Las comunidades con más ratio de maltratadas son Baleares (93), Canarias (81) y Murcia (80).
Los datos publicados ayer por el Observatorio de la Violencia de Género revelan que, en el conjunto de España, no sólo aumentaron las denuncias durante 2016 sino también las condenas a maltratadores -acaban en pena el 66% de los procesos, un 3,6% más que en 2015- y el número de órdenes de protección o la prohibición de comunicación (un 22% más en los últimos doce meses).
En la comunidad gallega, durante el pasado año se incoaron 1.396 órdenes de protección, de las que se adoptaron 872 y se denegaron 510. La estadística muestra que Galicia está a la cabeza en este tipo de medidas de protección. Presenta una ratio de órdenes por número de víctimas de violencia de género de 33,2, la cuarta más alta de todo el país, sólo por debajo de La Rioja (68,8), Castilla-La Mancha (39,3) y Castilla y León (35,2).
En cuanto al perfil del agresor, en Galicia es mayoritariamente un varon español. Ocho de cada diez maltratadores sobre los que se interpuso una órden de protección son varones de nacionalidad española (1.495), frente a 196 extranjeros. Lo mismo ocurre con las víctimas, 1.438 españolas por 253 extranjeras. Un total de 39 menores gallegos obtuvieron una órden de protección de sus agresores. Se registraron 13 procedimientos en el juzgado de menores.
