El acoso escolar, el bullying, es una problemática muy presente. Frecuentemente estos hostigamientos se extienden desde el patio del colegio hasta internet, un mundo en el que, si no hay un control adecuado, pequeños y adolescentes se pueden topar con otros peligros como el grooming -adultos que se hacen pasar por menores para lograr imágenes de contenido sexual y después chantajear a las víctimas- o el sexting -el envío de fotos o vídeos eróticos a alguien de confianza que después pueden acabar siendo difundidos sin control a través de chats o redes sociales-. Lejos de ser excepcionales, éstas y otras conductas están al alza. Y este aumento de casos, y su reflejo en los medios de comunicación, es una de las causas de que colegios e institutos cada vez muestren más interés por actividades formativas dirigidas a escolares para que conozcan estos riesgos y reciban consejos de cómo prevenir ser víctimas. Y también para que sepan las consecuencias legales si son ellos los autores de estas conductas.
Un ejemplo de esta demanda creciente por parte de los centros escolares son las actividades que imparte la Guardia Civil de Pontevedra en la provincia en el marco del denominado Plan Director para la Convivencia y Mejora de Seguridad en los Centros Educativos y sus Entornos, que implica también a la Policía Nacional y que nació en 2013 heredando los principios de un acuerdo marco de colaboración suscrito hace una década entre los ministerios de Interior y Educación. Y es que este año el incremento ha sido muy acusado, como lo evidencian las 152 charlas impartidas por guardias civiles en centros educativos de los municipios pontevedreses de su competencia durante el primer trimestre del curso -de septiembre a diciembre de 2016-, frente a las 37 del mismo período del ejercicio anterior.
Acoso escolar y nuevas tecnologías son las materias más demandadas -representan el 63% de las charlas-, seguidas de violencia de género, drogas y alcohol o bandas juveniles. Sobre esta última, es significativo como en 2016, tras desmantelar la Benemérita el grupo pandillero de los Chukys, se dispararon las solicitudes de formaciones sobre bandas. Y el plan director no sólo ofrece charlas. Reuniones de guardias civiles con la comunidad educativa, el acceso del profesorado a un experto policial para consultas o presencia policial en los entornos de los colegios en pro de la seguridad son otros pilares del proyecto.
Cuando están con los alumnos, los agentes que dan las formaciones les remarcan que la problemática está ahí y es real. "Les exponemos casos reales, que ocurren aquí, en nuestra zona; es lo que más les impacta, a los menores y a los padres", cuentan María Luisa Cajide y José Ángel Fernández, guardias civiles del puesto de Baiona que imparten charlas en Val Miñor. Precauciones a adoptar en redes sociales, páginas webs cuyos contenido "no son adecuados" o en el ámbito de la violencia de género saber distinguir y rechazar conductas "controladoras" son algunos consejos que estos dos agentes transmiten a los chavales. También les advierten de las consecuencias si son ellos los que cometen conductas ilícitas: "Les decimos que eso puede derivar en responsabilidades penales; eso también hay que hacérselo llegar y entender".
