El Juzgado de lo Social Número 4 de Castellón ha dictado una sentencia que reconoce, por primera vez en España, una incapacidad permanente en grado de gran invalidez a un enfermo que padece un cuadro clínico de fibromialgia con sensibilidad química múltiple y electrosensibilidad.

Fuentes del Bufete Domingo Monforte Abogados Asociados, que llevaron este caso, destacaron que el fallo judicial abre una puerta a los enfermos con el síndrome de sensibilidad química múltiple, considerada una enfermedad rara, ya que les reconoce el derecho a percibir, además de una prestación del 100% de su base reguladora, un complemento para pagar a una persona que les asista.

En opinión de los letrados, la sentencia supone un espaldarazo a una reivindicación de estos pacientes, que se ven obligados a vivir aislados por los graves efectos que la exposición a productos químicos ambientales y electromagnéticos provocan en su salud.

La resolución judicial reconoce que Rubén F.B., de 47 años, sufre las enfermedades síndrome de fatiga crónica, fibromialgia, Sensibilidad Química Múltiple, trastorno depresivo con desarrollo fóbico, hipersensibilidad electromagnética, colon irritable con múltiples intolerancias y escasa respuesta terapéutica.

Con este cuadro, el Instituto Nacional de la Seguridad Social le concedió en el año 2015 una incapacidad permanente en grado total para su profesión habitual, por la que Rubén percibía una pensión del 5 % de su base reguladora.En disconformidad con esta resolución recurrió a los tribunales.

Durante el juicio, la defensa demostró que Rubén necesita la asistencia de una tercera persona para poder realizar una vida "normal", y además, está incapacitado para cualquier profesión u oficio pues, tal como dice la sentencia, "es impensable encontrar una profesión en la que haya nula exposición a las innumerables intolerancias que el demandante padece".