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Lorenzo Silva: "Bloquear a las personas por su religión va contra la Constitución de EEUU"

El escritor alerta sobre el peligro de tomar "atajos simplistas" cuando "abdicamos de analizar el mundo en su complejidad" - "Estaba convencido de que iba a ganar Trump", asegura

Una imagen del público que asistió a la charla en el Auditorio Municipal do Areal, en Vigo. // Ricardo Grobas

"La condición humana puede retratarse de muchas maneras, y una forma especialmente eficaz suele ser el crimen". Con esta idea comenzó ayer el escritor Lorenzo Silva su charla, titulada "Historias de crímenes y criminales", en el Club FARO DE VIGO. Para el ganador del Premio Planeta 2012, la sociedad se retrata por sus crímenes, por cuáles se producen y por cuál es la respuesta -o la falta de ella- que suscitan entre la ciudadanía.

Entrevistado ante el público del Auditorio Municipal do Areal, en Vigo, por el periodista Rafa Valero, el autor de "La flaqueza del bolchevique" comentó algunos de los 102 relatos breves que conforman su último libro, "Todo por amor y otros relatos criminales". En total, Silva ha escrito más de 400 relatos para la serie "Vidas.zip", un proyecto que ha mantenido a lo largo de ocho años en elmundo.es. "Ayer mismo escribí el último -apuntó-. He realizado un esfuerzo de síntesis con intención literaria. No son artículos de opinión, no me interesa enjuiciar los hechos".

Todos los relatos fueron compuestos a partir de hechos reales de la actualidad, ya fuera de los grandes titulares o de noticias que pasaron más bien inadvertidas. Ofrecen, según su autor, un "fresco de la sociedad española globalizada" y aparecen no solo asesinos, sino también atracadores, corruptos, traficantes de personas... "No quería quedarme solo en el homicidio, que es el tópico de la novela negra -explicó-. El tráfico de personas tiene una gravedad social análoga".

Una patera en Tarifa

Sobre ese delito gira el relato "Perdida en el paraíso", en el que una nigeriana llega a España en una patera y la prostituyen. Lorenzo Silva contó la experiencia que tuvo mientras elaboraba un reportaje sobre el Estrecho de Gibraltar y las pateras. Arribó una de ellas a Tarifa y le llamó la atención que todos los varones estaban muy contentos, mientras que las mujeres mostraban un rictus fúnebre. "Le dije a una de ellas que lo peor [la travesía en el mar] había pasado y que la orden de expulsión no se llegaría a cumplir, que se quedaría en España. Me miró como si no supiese de lo que estaba hablando. Y no sabía de lo que estaba hablando. Aún le quedaba un calvario para poder saldar su deuda con la organización que la había llevado allí".

"Todo por amor", el relato que da título al libro, trata sobre una chica francesa acusada de colaborar en un secuestro en México. Su familia sostuvo que todo se debió un montaje de la policía mexicana, y Silva se vio "moralmente obligado" a insertar una nota aclaratoria. "No sabemos lo que pasa, solo tenemos versiones de lo ocurrido", dijo.

Con frecuencia los hechos delictivos descritos por Lorenzo Silva, licenciado en Derecho, son escalofriantes. Es el caso del homicida que deja el cadáver de una mujer en la basura, un hecho "degradante" hacia la víctima y también una forma frecuente de eludir la acción policial, ya que "los vertederos son muy difíciles de rastrear".

Menos eficaz fue el modus operandi de un joven que recurrió a Siri, la ayuda de voz de los teléfonos iPhone, para preguntarle directamente cómo deshacerse de un cadáver. La consulta quedó registrada en el servidor correspondiente. El novelista comentó cómo la tecnología rastrea nuestras vidas. "El otro día me subí al coche y el teléfono me djo: 'Te faltan 15 minutos para llegar al trabajo'. ¡Si yo no le había dicho nada! Simplemente constató que había viajado varias veces durante la semana a una casa y dedujo que ahí estaba mi oficina".

Al hilo de esta forma de localización digital y de Facebook, el escritor madrileño destacó que existe una empresa que posee perfiles de 200 millones de usuarios norteamericanos con datos obtenidos a través de los "me gusta" en dicha red social. "Esa empresa vendió los datos a Donald Trump", apuntó.

El libro se editó antes de la elección del 45º presidente de Estados Unidos, sobre el que Lorenzo Silva escribió un relato hace dos semanas. Explicó también que le propusieron escribir un perfil literario de uno de los dos candidatos a la Casa Blanca, Hillary Clinton o Trump, y escogió el segundo. "Estaba convencido de que iba a ganar", aseguró. "Lo de bloquear a las personas por su religión va contra la Constitución de EE UU", señaló. "Lo más interesante del personaje es la puerilidad de sus ideas. Mucha gente está decidiendo a partir del resentimiento y del fanatismo, y está tomando atajos simplistas -opinó-. Ocurre cuando abdicamos de analizar el mundo en su complejidad. Como decía Carl Sagan, podemos llegar a confundir lo que nos gusta con lo que es verdad".

"Mis relaciones no las gestiono a través de las redes sociales"

  • Explicó Lorenzo Silva que solo permanece en una red social, Twitter, para mantener una relación de confianza con sus lectores. "Me acabé yendo de Facebook. Mis relaciones no las gestiono a través de las redes sociales. Twitter no me consume mucho tiempo, limito mucho su uso", aseguró.Comparó la red social de los 140 caracteres con una pistola, protagonista de otro de sus relatos. "Es una herramienta neutra, depende de su uso". Recurrió Twitter para alabar el talento de los actores en una obra de teatro que vio, y enseguida supo que habían leído sus elogios. Pero también reconoce perfiles que rozan lo criminal. "Hay gente que va a insultarte, aunque yo no soy tan notorio como otros personanes", matizó. "Se estrelló un helicóptero con tres militares y el aparato se hundió a 800 metros de profundidad en el mar de Canarias. Uno se puso a celebrar en Twitter que se habían muerto tres pistoleros del Ejército". Condenó la "inhumanidad" y la "insensibilidad" de ese tipo de usuarios, como los que "se regodearon de la muerte de alguien con quien no compartían su modo de vida", en alusión al reciente fallecimiento de la modelo y cantante Bimba Bosé.Magnicidio en LeónEl último relato de "Todo por amor", el número 102, se titula "Las lágrimas de Montserrat", y parte del asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación Provincial de León, a manos de Montserrat González. Recordó Lorenzo Silva que este ha sido "el único magnicidio del siglo XXI en España", y que "la única persona que ha sorteado el aparato de seguridad" de un cargo importante ha sido "una ama de casa sexagenaria. Lo pones en una novela y nadie te cree".

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