Menoria significa hogar en amárico, la lengua mayoritaria de Etiopía y Menoria es también el nombre de la organización gallega de cooperación que un grupo de padres adoptantes de niños etíopes decidió constituir hace diez años para ayudar al país de origen de sus hijos. En estos momentos, esta ONG colabora con distintas entidades locales en cuatro proyectos de desarrollo en distintas regiones del país africano.

"No recibimos ninguna ayuda institucional ni la hemos pedido nunca. Preferimos no tener que depender de si una ayuda que puede llegar o no. Contamos con las aportaciones de los socios, donaciones y actos solidarios que organizamos para recaudar fondos", explica Nacho Fernández, miembro de Menoria y padre de dos niños etíopes.

Uno de estos actos se celebrará en Vigo el próximo viernes, día 26, una "discofiesta" en la sala Rouge Sound Club dirigida a niños y familiares, cuya entrada es de 5 euros y que tiene también fila cero (ES46 2038 7809 17 6000077706). "Somos una ONG modesta, de 90 socios, que colaboramos en lo que podemos con el país de nuestros hijos, un país hospitalario y con un futuro esperanzador", afirma Fernández, que añade que aunque este país africano está creciendo por encima del 10% anual, "aún existe pobreza que hay que atender".

Uno de los programas con los que colabora es el que desarrolla el misionero español Ángel Olarán en Wukro, un programa que comenzó hace treinta años dando cobertura social a niños huérfanos y que ahora atiende también a enfermos de sida y personas sin recursos. "Comenzó trabajando con niños huérfanos de esa zona y ahora tiene hasta una universidad", comenta.

Menoria aporta fondos también para el programa de desarrollo urbano comunitario en uno de los suburbios de Addis Abeba, cuyo objetivo es empoderar a las mujeres, algo que repercute a su vez en toda la comunidad, asegura Fernández. "Se les da la ayuda necesaria para que monten una cooperativa. Cada semana, el grupo se marca un objetivo y es también el grupo el que financia los proyectos de trabajo, dando los préstamos, que después retornan al grupo con los intereses marcados", explica.

El tercer proyecto es el de asistencia sanitaria para personas sin recursos que presta la orden de Santa Teresa de Calcuta también en Addis Abeba, y el último es el de construcción de pozos en la región de Angar Guten. "Que una comunidad cuente con un pozo es importantísimo porque supone tener una zona donde cultivar", afirma. De momento, Menoria ha financiado uno y en 2017 esperan poder costear el segundo.