El arzobispo compostelano, Julián Barrio, hace una distinción entre "caminantes" que recorren el Camino de Santiago y "peregrinos con fe" que lo hacen por motivos espirituales, según un comunicado divulgado hoy anunciando una conferencia prevista para el próximo miércoles.

La Iglesia católica compostelana ha mostrado en numerosas ocasiones diferencias entre quienes recorren los senderos que confluyen por Santiago de Compostela y que han sido inscritos en la lista del Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1993, aunque no ofrece datos sobre cuantos lo hace por motivos no espirituales.

Según un comunicado de la Cámara de Comercio de Santiago de Compostela, organizadora de una conferencia el próximo miércoles en la capital gallega del arzobispo, éste "hace una distinción clara entre peregrinos y caminantes".

Precisa que en opinión de Barrio "el peregrino jacobeo es alguien que se puso en camino entrando dentro de sí mismo y tratando de descubrir la novedad de Dios. En cambio, la figura del caminante es más bien la de un 'observador' que percibe su contorno sin tener en cuenta la meta, que es lo que da sentido al camino".

En 1970 la Iglesia comenzó a atribuir un documento denominado "La Compostela" a todos aquellos que recorrieran cien kilómetros a pie o doscientos en bicicleta o a caballo, a condición de expresar una voluntad espiritual.

En mayo de 2014 la oficina del Peregrino, dependiente del Arzobispado, cambió el documento y extendió "La Compostela" a todos aquellos que recorren el Camino de Santiago, independientemente de expresar su fe religiosa, pero continúa sin ofrecer datos sobre cuantos de ellos confiesan motivos espirituales y cuanto no.

Un estudio divulgado en 2007 por el Instituto de Estudios Turísticos de Galicia en base a encuestas a caminantes estableció que sólo 38,10 % confesó una verdadera motivación religiosa en hacer ese Camino hasta Compostela, donde según una leyenda, fueron hallados en el siglo XI los restos mortales del apóstol Santiago.

Según la nota de la Cámara de Comercio, el arzobispo cree que "la peregrinación es un acontecimiento espiritual que puede llevar a acoger el don de la fe a quien no lo tiene"