El cementerio municipal de Pontevedra es uno de los pocos en Galicia que cuenta con un columbario y, según explica Juan Perdiz, director gerente de la funeraria pontevedresa San Marcos, se estudia la posibilidad de ubicar un espacio dentro del propio cementerio para quienes lo deseen puedan esparcir allí las cenizas de los difuntos en un terreno natural acotado y al aire libre.

"El de Pontevedra es un cementerio público, por tanto, yo no lo considero un territorio sagrado. Espero que con esta directriz papal no se considere que no es adecuado", se preguntaba ayer Perdiz. "Profesionalmente, haré lo que me pida la familia y cumpliré la voluntad de los difuntos si es que la hay, pero personalmente no comparto este mensaje de la Iglesia y creo que muchos sacerdotes van a tener que obviarlo para poder seguir haciendo su trabajo", añade.

Perdiz cuenta también con un columbario en su funeraria, ya que estos espacios para depositar urnas no son exclusivos de los cementerios.