A los falsos mitos sobre el sexo y el embarazo se unen, según los expertos, la presión social sobre las futuras madres, un cóctel que dificulta el vivir con naturalidad la sexualidad durante esta etapa de la vida. "A nivel social hay unas ideas preconcebidas de cómo una mujer debe sentir la maternidad, se ve como algo romántico, el sentimiento hacia el hijo... y todo eso genera estrés o miedo por no sentirlo", explica la sexóloga Lourdes Rodríguez, miembro de la junta directiva de la Sociedade Galega de Sexoloxía, que asegura que esta presión social influye en las relaciones de pareja. "A nivel social parece que la maternidad es lo primordial y esto hace que las mujeres puedan sentirse mal si ven que disfrutan más de la sexualidad en esta etapa que del hecho de ir a ser madres", sostiene.

Esta experta aboga por vivir la sexualidad con naturalidad durante el embarazo, informarse con sanitarios por si hay alguna práctica restringida en su caso (como puede ocurrir en los embarazos de riesgo donde el sexo no está recomendado) y buscar la complicidad con la pareja para disfrutar de esta etapa. "Hay un gran desconocimiento y falsos mitos sobre el sexo en la gestación; en general no hay riesgos", indica esta sexóloga, quien lamenta que al no recibir educación sexual, la gente "se basa en creencias culturales y en falsas creencias".