Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La enfermedad desconocida que mata al año a 17.000 españoles

La sepsis es la primera causa de muerte por infección -Un estudio noruego ha conseguido reducir su letalidad un 40%

Pablo Vidal. // Faro

La sepsis o septicemia es una respuesta del sistema inmunológico ante un organismo infeccioso que entra en el cuerpo. Al verse atacado, el sistema se sobrecarga al intentar reaccionar ante el enemigo y la persona empieza a sufrir fallos en sus órganos. Es como si la sangre se envenenara y con ella el resto del organismo. Afecta a unas 50.000 personas en España cada año y de ellas 17.000 mueren. Un equipo de Noruega ha conseguido reducir la mortalidad en un 40% a través de sencillas medidas en la formación de los enfermeros.

Los contagios por virus que desembocan en sepsis son muy habituales en entornos hospitalarios. Son especialmente sensibles las zonas donde se encuentran los pacientes más graves, como las áreas de cuidados intensivos. Si el sistema inmunológico ya está deteriorado es más probable que se produzca una infección, por lo que es habitual en enfermos, ancianos y también bebés. 20 recién nacidos murieron el año pasado en México en apenas unas semanas por un choque séptico después de infectarse con una bacteria en el propio hospital, la Klebsiella, la misma que hizo saltar todas las alarmas en el Álvaro Cunqueiro con cuatro aislados hace unos meses. Estos casos ilustran la voracidad de la que es la primera causa de muerte por infección en el mundo.

Los investigadores noruegos de la Universidad de Nord centraron su atención en el papel que desempeña la enfermería, ya que estos profesionales son los que tienen un contacto más directo y continuo con los pacientes. El equipo creó un diagrama para la identificación de la sepsis y una plantilla donde debían ir apuntando la gravedad de la enfermedad. Los médicos del hospital Levanger recibieron información al respecto por escrito, mientras que los enfermeros asistieron a un curso de formación de cuatro horas. El resultado fue que aumentó la supervivencia de los pacientes contagiados, redujo el desarrollo de la sepsis grave durante las estancias en un 30% y además los pacientes permanecieron menos días en cuidados intensivos.

Una de las vías más común de infección es la neumonía o las infecciones urinarias. Las prácticas quirúrgicas, como colocar un catéter, también aumentan la contaminación de la sangre. Puede comenzar como una infección sin importancia, pero avanza muy rápido. El único síntoma que puede identificar el paciente es la fiebre, pero en su interior los órganos comienzan a fallar, la tensión varía y pueden conducir a un estado de shock. Es tan letal que mata a más personas que el cáncer de mama y el intestinal juntos.

Sin embargo, si se actúa de manera inmediata su tratamiento es relativamente simple. Se basa en suministrar antibióticos para tratar la infección, líquidos y medicamentos por vía intravenosa para mantener la presión arterial y quizás oxígeno y plasma para corregir problemas en la coagulación.

"Lo más importante es saber que es una enfermedad de mucha mortalidad en la que el tiempo cuenta mucho, poner el tratamiento cuanto antes reduce las posibilidades de muerte", explica el vicepresidente de la Asociación Gallega de Medicina Intensiva y Unidades Coronarias, Pablo Vidal. Desde este grupo han puesto en marcha en algunas UCIS gallegas proyectos similares al noruego, pero dirigido a los médicos. "Cuando se dan cursos, en los meses siguientes mejora mucho la detección de cualquier enfermedad porque el personal está más atento, pero poco a poco se vuelve al estado anterior", lamenta. Además subraya la dificultad de llevar a cabo una formación similar a la del grupo noruego: "Escogieron un hospital de unas 120 camas, en Galicia superan las 800, formar a todo ese personal es muy complicado".

Jorge Rouco, enfermo del área de Vigo, apunta otro hándicap: "No hay suficiente personal para atender correctamente a los pacientes, no podemos estar tan pendientes como es el caso noruego". El estudio indica que cuanto mayor sea la vigilancia del enfermero, cuanto más tiempo le dedique al paciente, mayor es su probabilidad de no llegar a un caso grave.

Algunos centros gallegos tienen sus propios protocolos, pero además España cuenta con el Código Sepsis, un protocolo que mejora la atención de estos pacientes aprobado por el Ministerio d Sanidad. Sin embargo, su aplicación depende de las Comunidades Autónomas y a veces su efectividad se pierde en el camino burocrático. La Asociación trabaja para plantear a la Consellería de Sanidade su puesta en marcha en el Sergas. Vidal apunta a que con solo colocar carteles que recordasen la importancia de ciertas prácticas ya mejorarían los resultados.

Compartir el artículo

stats