Mudafar y Ahmed, dos niños iraquíes de 10 y 8 años respectivamente, tienen una enfermedad hepática que hace peligrar sus vidas. Tras haber permanecido varios meses en el campamento para refugiados de Katsikas, han sido trasladados el miércoles a Sevilla donde los niños serán tratados de su enfermedad.
Este hecho ha sido posible gracias a la gran labor que ha llevado a cabo la ONG gallega Aire que ha iniciado desde hace meses, una campaña para solicitar al gobierno español su traslado desde el campo de refugiados para posibilitar su tratamiento. Esta iniciativa ha contado con un gran apoyo popular ya que, hasta la fecha, se han recogido alrededor de 200.000 formas en la plataforma Change.org.
