Un grupo de personas que padece fibrosis quística comenzó ayer desde Muxía la primera de la etapas del Camino de Santiago que van a recorrer. La Federación Española de esta enfermad quiere fomentar así la divulgación de esta dolencia de origen genético que afecta a diferentes órganos y que aún no tiene curación.

Este es el quinto año consecutivo que se realiza esta ruta, una terapia alternativa en el tratamiento de esta enfermedad, tanto por la actividad deportiva como por la oportunidad de compartió experiencia con otros pacientes.