El grupo financiero italiano Fininvest, propiedad de la familia del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, demandó ayer a la empresa francesa Vivendi por incumplimiento de contrato en la compra del canal de pago Mediaset Premium y le exige un pago de 570 millones de euros en daños.
La demanda de Fininvest se produjo cuatro días después de que Mediaset, el gigante audiovisual de Berlusconi, también presentara una denuncia ante la justicia italiana contra la empresa gala.
Fininvest, que es accionista de Mediaset, considera que las pérdidas que sufrirá su empresa si Vivendi no acata el pacto firmado el pasado abril serán de 570 millones de euros, informó la compañía en un comunicado.
La intención del grupo financiero italiano, de los más importantes en el país, es la de presionar a Vivendi para que compre la totalidad de Mediaset Premium, como había firmado el pasado abril con Mediaset.
