La undécima edición del Resurrection Fest de Viveiro (Lugo), evento que cada año trae lo mejor del metal, rock y hardcore a tierras gallegas, será la más grande e internacional hasta el momento, con una previsión de asistencia que rozará las 80.000 personas de más de 30 países, como México, Japón o Indonesia.

Los números de este evento, que se celebrará entre el 7 y el 9 de julio, lo han posicionado como el festival más grande de Galicia y el más importante del género en toda la península ibérica, con un destacado impacto económico en los negocios de la localidad que asciende a más de 4,5 millones de euros.

Este año, según Iván Méndez, uno de los "padres" del festival, el evento ha supuesto "un reto organizativo" que se ha extendido durante un año y seis meses, con 75 grupos repartidos en tres escenarios específicos dedicados a los cabezas de cartel, metal, punk y stoner rock.

Uno de los principales atractivos, además de poder disfrutar de un emplazamiento como la localidad de Viveiro, será su cartel con algunas de las "mayores bandas de rock mundial", como "los legendarios Iron Maiden", que realizarán un show de dos horas con espectáculo de pirotecnia y robótica, o bandas referentes del punk, como The Offspring o Bad Religion, que regresan a Galicia.

Asimismo, será "el primer año en que se agoten todas las entradas", que prevén vender en su totalidad entre este fin de semana y el próximo lunes.

Todo ello se verá acompañado de un importante trabajo de escenografía para que cada asistente tenga la sensación de estar en un parque temático del rock al poner sus pies en el recinto.

Ante este volumen de público, se desplegará un dispositivo de seguridad en colaboración con las fuerzas del orden, el ayuntamiento y otras entidades, en el que participarán más de 300 personas, además de una nueva zona de acampada destinada a 5.000 asistentes.