Adolfo Fernández, comisario de la exhibición "Emporium. Mil anos de comercio en Vigo", asegura que con esta iniciativa se le da valor añadido a todas las piezas que estaban relegadas en el archivo municipal, en el Museo Quiñones de León. Durante los años en los que la construcción inmobiliaria no tenía freno, se descubrieron en Vigo cientos de piezas que se fueron guardando hasta ahora. Piezas como la crátera de Toralla, una gran vasija decorada supuestamente con motivos ligados al dios Baco, encontrada en las obras de construcción de un chalet en los años noventa en la isla de Torall, que nunca se había pegado. El equipo de la exposición generó un dibujo para poder recrearla encajando los pedazos que se conservan. Se sabe que se hizo en las alfarerías de Braga y que estaba colocada en la puerta de la villa de Toralla.

Esta es exposición de arqueología de mayor entidad que acoge Vigo. Fernández sostiene que vendrán representantes del mundo científico de todo el mundo a verla "porque contiene piezas que nunca se han expuesto antes y que solo se han visto a través de catálogos".

Los comisarios han preparado un catálogo de la exposición que detalla todo el trabajo de investigación que hay detrás. "Será una obra enfocada a los profesionales debido a la importancia del material que tenemos en Vigo, pero también podrán disfrutarla los ciudadanos que tengan inquietud", afirma Fernández.