Desde Agame y la Rede de Mulleres Veciñais contra os Malos Tratos de Vigo insisten en que mueren mujeres cada día, "que aún así los políticos siguen dedicando segundos a la violencia de género en los debates", y que es necesario que el sistema no se lo ponga más difícil a las víctimas de maltrato. "Hay que tener la formación adecuada para orientar a las mujeres que piden ayuda e informarlas teniendo en cuenta sus condiciones. Ahora se produce una victimización de la víctima ya que tiene que pasar por muchos sitios en los que debe repetir lo mismo. Lo que reclamamos es que haya una ventanilla única y que de ahí las deriven", dice Rosa Fontaíña.
"Lo que denunciamos es que no se ponen las condiciones adecuadas para tomar declaración a los menores, o que se tardan meses en escuchar a una víctima sexual dentro del entorno familiar", apunta Estrela Gómez.
En la denuncia destacan la necesidad de que haya "una regulación respecto a los plazos en los que se deben producir las distintas etapas de la intervención (flexibles, en función de la víctima), la remodelación de los espacios en los que se realizan las entrevistas, así como la dotación de los equipos técnicos de los servicios técnicos de justicia (Institutos de Medicina Legal) tanto en lo que se refiere al número como al perfil profesional necesario para la atención de víctimas de violencia de género y víctimas menores de edad".
"Ahora mismo las mujeres no se sienten escuchadas cuando acuden a pedir ayuda. Tenemos la sensación de que la presunción de inocencia se aplica corriendo al maltratador, mientras que a la mujer se le aplica la presunción de mentira. La primera noticia que les llega a las víctimas de violencia de género, muchas veces, es que no las están creyendo", lamenta Fontaíña.
