La Rede Galega de Apoio ás Persoas Refuxiadas ha denunciado la situación en la que se encuentran los ciudadanos sirios que han tenido que abandonar su país y el rechazo que reciben social y políticamente. Para visibilizar este problema, ha convocado concentraciones en ocho localidades gallegas entre el 18 y el 20 de junio, con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas. Las manifestaciones empezarán el día 18 en A Guarda (Pontevedra) a las 20:00 horas y continuarán el día 19 en Vigo a las 11:00 horas y, a las 12:00 horas, en Pontevedra, A Coruña, Santiago y Ferrol. Por último, el día 20 tendrán lugar en Lugo a las 20:00 horas y en Ourense a las 20:30.

Monje criticó que, solo en abril, se haya confirmado el fallecimiento de "881 personas refugiadas" y ha destacó la poca repercusión de estas muertes, entre las que ha denunciado el fallecimiento de un bebé de un año en una estación de autobuses de Turquía. Los refugiados no solo fallecen ahogados, incide, sino también víctimas del "agotamiento" o el "hambre". La plataforma denuncia que la puerta de entrada de personas refugiadas en España, que se ubicaba en Melilla, haya sido "cerrada". En un viaje que realizó a este lugar, la propia Monje encontró las "oficinas cerradas", una evidencia de que esa "puerta de bienvenida" ya "no funciona". Por eso reprueba que se exijan "visados especiales" a los refugiados sirios para que accedan a territorio español, lo que dificulta su entrada en el país. Así, ha afirmado que a la "vía cerrada" de Turquía "se ha sumado Melilla".

La ciudadana siria Nour Al-Hussen ha lamentado que, mientras en 2010 la esperanza de vida de los ciudadanos sirios se situase en los 70 años, ahora haya descendido "hasta los 55" y ha dado algunas cifras como la de los 1,9 millones de heridos y ha criticado que, mientras anteriormente Siria acogió a refugiados de Líbano o Irak, ahora los ciudadanos de este país "estén solos". Siria es un "ejemplo de violación de los derechos humanos", ya que en este Estado se atacan "hospitales y escuelas", como los de su ciudad de origen que, según denunció, han sido bombardeados por Rusia". Nour Al-Hussen lamenta que los niños sirios "pierdan años de educación" y que las escuelas hayan sido convertidas en centros donde se les enseña a usar armas y la "vulnerabilidad" de las mujeres y niñas que se ven obligadas a "casarse con combatientes" que llegan a sus zonas de residencia o que se ven convertidas en esclavas.