"Querer ser perfecto es horrible y aburridísimo. Hay que bajar las expectativas y saber que si te equivocas, que lo harás, no pasa nada". Con esta frase, la psicóloga Rocío Ramos-Paúl, popular por el programa de televisión "Supernanny", se refirió a la necesidad de perder el miedo a cometer errores para de esta forma ser capaces de afrontar los cambios que vienen asociados a la vida, como el hecho de ser padres, y que en muchas ocasiones puede frenar el avance de la pareja e incluso condenarla al fracaso. Ramos-Paúl y el también psicólogo Luis Torres estuvieron ayer en el Club Faro para dar algunas claves para afrontar los cambios que supone la paternidad en la pareja y que recoge en su libro "La pareja en familia". Con esta obra, los dos psicólogos pretenden guiar a las parejas para conciliar su faceta romántica con la de ser padres para llevar a buen término el proyecto en común que han emprendido.
"Cuando uno dice qué suerte tiene esa pareja, qué feliz es, es mentira, detrás de esa felicidad hay mucho trabajo", aseveró la ponente. Sin embargo, todo ese esfuerzo merece la pena, asegura. "Una pareja es un equipo que saca adelante un proyecto maravilloso: la familia. ¿Merece la pena el esfuerzo que conlleva? Sin duda", afirmó Ramos-Paúl.
Ramos-Paúl y Torres decidieron acometer el tema de cómo afecta la llegada de los hijos a la relación de pareja animados por los casos que tratan en consulta, ya que, en muchos casos, las parejas que acuden por problemas con sus hijos terminan acabando en terapia. "A la pareja hay que mimarla y, a veces, esto se nos olvida con la llegada de los hijos", advirtió la psicóloga.
Es importante saber reajustarse a la nueva situación y saber negociar. "Todos nos hemos dicho: 'Cuando sea madre o padre no haré ni diré lo que decía mi madre o mi padre' y de repente, te descubres haciendo y diciendo lo mismo, porque reproducimos lo que hemos visto", explicó.
La falta de comunicación está detrás de buena parte de los conflictos de pareja, por lo que hay que hacer de esta una rutina más del día a día, a pesar de la falta de tiempo, del cansancio del trabajo o de las obligaciones domésticas que se tengan. "Una frase tan elemental como 'Qué tal te ha ido el día' cambia el ambiente de la familia?", apuntó la psicóloga, que añadió que siempre hay un momento para desarrollar una conversación.
"No estamos hablando de una conferencia, sino de diez minutos, diez minutos que tienen que convertirse en algo rutinario de todos los días, diez minutos para nosotros, para hablar del día y de lo que queremos hacer, mientras nos ponemos el pijama o ponemos la lavadora... Pero todos los días un ratito, hasta que se convierta en un hábito", añadió.
También las relaciones sexuales se negocian: la cantidad y la calidad. Es lo que Ramos-Paúl y Torres llaman "agenciar las relaciones sexuales". "Cuando proponemos esto a las parejas lo primero que nos dicen que esto les quita espontaneidad y que prefieren esperar a que tengan ganas, pero por la falta de tiempo, el cansancio, etcétera, las ganas se pasan. Y al principio puede parecer algo forzado, pero la espontaneidad llega también, después", explicó la 'supernanny'.
Hay que tener presente que la convivencia siempre genera conflictos. "Lo importante es saber cómo gestionarlos", afirmó el psicólogo. Para resolver los problemas, los psicólogos recomiendan un lugar público, fuera de casa, lo que permite moderar la voz. Es importante también centrarse en el problema actual y no poner sobre la mesa otros anteriores. "Es importante no solo comunicarse, sino saber cómo hacerlo. Los problemas de ayer, de anteayer o de hace un año no resuelven el actual", explicó Torres.
También es importante retirarse de la discusión si se está enfadado, para evitar que la situación se complique. Los problemas en frío, tienen una solución más sencilla. Los autores de "La pareja en familia" también recomiendan no discutir delante de los hijos y si se ha hecho, que también sean testigos de la reconciliación, algo de lo que casi siempre se les priva. "Tenemos que plantearnos qué tipo de relación de pareja queremos transmitir a nuestros hijos porque si ellos ven que los problemas se resuelven discutiendo, ellos harán lo mismo en el colegio porque no tendrán otras herramientas para solucionar sus problemas", advirtió la psicóloga en la charla-coloquio que presentó la periodista Iria Carregal.
Una cuenta de ahorros
- Rocío Ramos-Paúl y Luis Torres emplean el símil de la cuenta de ahorros para explicar cómo funciona una pareja. "Al principio, todo es ahorro. Inviertes, e inviertes pero no gastas nada. Pero con el paso del tiempo, empiezan a surgir los problemas y empiezas a tirar de lo que tienes. Y si no repones, llegará un momento en que te quedarás sin remanente. Por eso es importante seguir invirtiendo", explicó la psicóloga.Y no se trata, advirtió, de cuánto invierte cada uno en cada momento, sino de expresar también lo que se siente y lo que se necesita en cada momento. "Muchas veces la percepción del problema no es el mismo porque cuando hay problemas y no hay comunicación suelen pasar dos cosas. Una, que todos sean reproches y otra, que la parte a la que le molesta algo se calle y lo vaya acumulando hasta que un día no puede más y lo suelta. Pero claro, hasta que no hace esto, la otra parte de la pareja cree que su relación es satisfactoria", explicó Ramos-Paúl.El libro incluye ejercicios para poner en práctica y un test para evaluar el grado de satisfacción que produce al lector su vida en pareja. Con este, sus autores invitan a la pareja a reflexionar sobre su relación y a pensar qué cambios necesitan y por dónde empezar. "Nosotros ponemos las herramientas porque a veces esto es lo que nos falta", puntualizó Torres.Y si a pesar de todo, la pareja se rompe, "La pareja en familia" también incluye un capítulo dedicado a la separación, en el que sus autores explican cómo afecta esta decisión a los hijos dependiendo de su edad, cómo comunicársela y qué hacer en cada etapa de la separación. Pero para no llegar a este extremo, Ramos-Paúl recomendó llevar a cabo una práctica tan sencilla como sonreír a la pareja cuando llega a casa. "Ya verán como todo es más sencillo y parece todo más agradable", dijo.
