La concejala de Igualdad y Políticas Inclusivas del Ayuntamiento de Valencia, Isabel Lozano, dijo que el cardenal Antonio Cañizares podría haber incurrido en un delito de incitación a la discriminación, al odio y a la violencia, castigados en el actual Código Penal. En una misa celebrada en el Pontificio Instituto Juan Pablo II de Valencia, el arzobispo defendió el "bien precioso de la familia cristiana" ante lo que tachó de "escalada contra ella de dirigentes políticos, el 'imperio gay' y ciertas ideologías feministas". Estas declaraciones, según Lozano, "son muy graves".