El juzgado de lo Penal número 6 de Valencia condenó a un padre a una multa de 720 euros por un delito de abandono de familia por las constantes faltas de asistencia a clase de su hija adolescente.

La sentencia, facilitada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana, considera probado que el progenitor incumplió de manera reiterada el "deber legal de procurar una adecuada formación y educación a su hija menor de edad". Además, determina que el padre no adoptó medidas para que la estudiante asistiera al centro educativo, pese a que conocía la tendencia al absentismo de la menor y fue advertido por los servicios sociales. Por este motivo, el fallo considera al padre como "consentidor y motivador del absentismo de su hija".

La menor estaba matriculada en un instituto durante el curso escolar 2012-2013 y alcanzó una media de absentismo escolar no justificado del 56 % en los meses de marzo y abril. Durante el curso 2013-2014, el porcentaje de absentismo no justificado llegó al 65 % en marzo.

La pena estipulada por el magistrado es de 6 meses de multa a razón de 4 euros diarios, lo que hace un total de 720 euros, además del pago de las costas procesales.

Los servicios sociales del municipio de Sagunto habían informado al padre sobre su incumplimiento del compromiso adquirido de "normalizar" la asistencia de la niña al IES y se encontraron con un padre "consentidor" y "motivador" de ese absentismo.