El dramaturgo y guionista de televisión Josep María Benet i Jornet, Premio de Honor de las Letras Catalanas, uno de los puntales del teatro catalán contemporáneo y artífice de una nueva generación de jóvenes dramaturgos, recibió ayer la Medalla de Honor de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).
El acto, al que ha asistido Jose Luis Acosta, presidente de la SGAE, se ha concebido como un aperitivo entre amigos, mientras Ramon Muntaner, director de la SGAE en Cataluña y Baleares, ha hecho una semblanza de "Papitu", como familiarmente se conoce al escritor, de quien el pasado año se hizo público que padece alzhéimer.
Muntaner ha recordado, con música de fondo de canciones de Bob Dylan, que Benet i Jornet se hizo socio de la SGAE el 30 noviembre de 1964, con 24 años, cuando acababa de estrenar la obra teatral "Una vella, coneguda olor", y cómo en estos 52 años ha registrado 117 obras de teatro y música "y la friolera de 4.493 capítulos de series de televisión, lo que no lo puede decir cualquiera".
La guionista y actriz Marta Molins, colaboradora de Benet i Jornet durante muchos años, ha contado algunas anécdotas y ha definido al escritor como "creativo, próspero, una persona leal y gran defensor de los guionistas, sensible e imaginativo", pero también "caótico y despistado".
Entre estas anécdotas, ha revelado que Benet perdió en un taxi los cinco primeros capítulos de la serie "Poble Nou", una ficción de la vida cotidiana que fue la primera telenovela catalana emitida por TV3 y que supuso "un gran éxito con audiencias comparables a los partidos del Barca".
Su hija Carlota ha dado las gracias en nombre de su padre, que ha estado en el acto pero no ha hablado, y al que, según ha dicho, le ha hecho mucha ilusión este reconocimiento.
