Las nueve Reales Academias integradas en la Junta Rectora del Instituto de España presentaron ayer un manifiesto en favor de un pacto de Estado por la educación para proteger un área tan sensible y tan fundamental en el desarrollo del país ante reformas motivadas por cambios políticos.

"Llevamos casi medio siglo de reformas sucesivas, tanto en los niveles de primaria y secundaria como en los superiores, que desafortunadamente no han dado todos los resultados positivos que serían de esperar. En lo que se refiere a la universidad, es preocupante la creciente burocratización de la docencia y la actividad investigadora", reza el escrito.

El presidente del Instituto de España y de la Real Academia Nacional de Medicina, Joaquín Poch, destacó que se trata de una medida inusual ya que el Instituto no suele pronunciarse públicamente, pero esta vez ha decidido hacerlo "por las especiales circunstancias del país", que hacen necesarios "muchos pactos de Estado respecto a cuestiones básicas", si bien la "inaplazable y fundamental" es la relativa a la educación.

Se trata de mantenerla "a salvo de las contingencias políticas e ideológicas marcadas por cada legislatura", de garantizar una continuidad de los programas educativos, de acordar unos parámetros de "calidad de los contenidos y calidad y selección del profesorado", ha destacado Poch, quien también ha reclamado que la sociedad debe ser consciente de que la educación "comienza en la familia".