"Je, je... luna" es la primera exposición que revisa la obra de la artista María Luisa Fernández (Villarejo de Órbigo, León, 1955) desde finales de la década de los setenta, dentro del CVA (Comité de Vigilancia Artística, 1979-1985), hasta 1997, año en que realiza su última exposición individual. A partir de ese momento, María Luisa Fernández decide abandonar el taller y dedicarse a formar a nuevos artistas en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Vigo. "Je, je... luna", proyecto del centro Azkuna Zentroa de Bilbao, no solo redescubre al público a esta artista, cuyas obras forman parte de colecciones tan importantes como las del Museo Nacional Centro Arte Reina Sofía de Madrid, el MACBA de Barcelona y el Artium, Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo de Vitoria-Gasteiz, sino que ha sido un acicate para que la propia escultura rompa un silencio creativo de veinte años.

"Esta exposición sirve para cerrar una época de trabajo y abrir una nueva. Estoy encantada de ver de nuevo mi obra, que aún sigue teniendo mucha carga emocional para mí, y de volver al mundo del arte de forma activa. Creo que mi próxima exposición la veremos pronto", anunció durante la presentación de esta retrospectiva, con la que el Museo de Arte Contemporáneo de Vigo (MARCO) arrancó ayer su nueva temporada expositiva, junto con "Kanala", de June Crespo, muestra que se eshibe en el Espacio Anexo.

María Luisa Fernández reconoció ayer que es difícil explicar los motivos que la impulsaron a abandonar la producción artística, pero matizó que, en cualquier caso, no se trata de un parón. "Es complicado decir por qué dejé de hacer, pero he estado cerca no solo de la enseñanza, sino también del arte, que me ha interesado siempre. Pero no ha sido un parón. En arte no se puede hablar de parón porque sigues viendo, pensando, imaginando como un artista. Pero entre lo que piensas y lo que haces hay mucha diferencia y para hacer tienes que estar creando", explicó.

"Je, je... luna" llega a Vigo desde el centro Azkuna Zentroa, completando un círculo vital, según la comisariada de la muestra, Beatriz Herráez. "Nos parecía lógico que la exposición que revisa la obra de María Luisa Fernández comenzase en Bilbao, donde estudió y donde realizó las piezas que la forman, y terminase en Vigo, ciudad donde decidió establecer su residencia en 1992 y de cuya universidad es profesora", explicó.

La muestra se inicia con piezas, objetos y documentos pertenecientes al periodo de CVA, siglas que se asocian a lo que se conoce como "Nueva escultura vasca", un grupo de artistas que se convirtió en referente de las prácticas y debates artísticos que marcaron la decáda de los ochenta en el País Vasco. Este colectivo estaba concebido como una empresa artística y fue puesto en marcha junto al artista Juan Luis Moraza, también profesor en la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra. Fue, según la artista, una época creativa muy activa. "Hacía por la necesidad visceral de hacer", reconoció.

Cierran esta revisión los "Artistas ideales", la última exposición de María Luisa Fernández, en 1997, tras dos décadas de trabajo ininterrumpido. Se trata de esculturas realizadas en madera policromada, concretamente en pino gallego, figuras tridimensionales que remiten a representaciones gráficas de la estadística. Entre las obras incluidas en esta retrospectiva se encuentra "Burlas expresionistas", instalación perteneciente a la colección del Reina Sofía. Asimismo, la artista reprodujo una obra, "Melena II", para esta muestra, ya que se desconoce el paradero de la original. "Je, je... luna" permanecerá abierta hasta el 29 de mayo en la planta baja.