Autoridades y representantes de la Fundación Valle-Inclán protagonizan una ofrenda floral de homenaje y recuerdo al autor de 'Luces de Bohemia' y padre del esperpento con motivo del 80 aniversario de su fallecimiento.

En este acto celebrado en el cementerio de Boisaca han participado, entre otros, el vicepresidente de esta Fundación, José Juan Durán, el secretario xeral de Política Lingüística, Valentín García, el regidor de Santiago, Martiño Noriega y el conselleiro de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria, Román Rodríguez.

El propio Durán define a Valle como la personificación de "un permanente alegato a la libertad", recordando la "larga" tradición de la Fundación para "recordar" al escritor desde la responsabilidad y la "generosidad".

Rodríguez, por su parte, define al autor como "un gallego" que consiguió consagrar "una imagen única de sí mismo" y "crear un género literario", destacándolo como una figura "icónica" e "indiscutible" de la literatura universal. "Un gallego que vio el mundo con ojos gallegos", insiste y que sin embargo fue capaz de "trascender" y situar su obra en el "conjunto de las lenguas de todo el mundo".

Martiño Noriega tomó la palabra para concluir el acto de homenaje, recordando que fue "en una Noche de Reyes" cuando "uno de los genios" de Galicia "dejó de agasajar con su pluma", que calificó de "irónica" y "propia de un rebelde".

Aunque "no era 'picheleiro' de nacimiento", Noriega recuerda que sí lo era de "adopción", con un papel en su participación en las tertulias literarias del 'Derby' entre muchos otros, conformando un "caldo de cultivo" literario en al propia capital gallega.