La segunda fiesta del vino espumoso Rías Baixas cerró anoche las puertas en Salvaterra de Miño con más de 9.000 asistentes, según los datos facilitados por el gobierno local. Así, el Concello cifró entorno a las 3.500 personas las que acudieron al certamen el sábado y cerca de 5.000, ayer, a distintas horas del día.

Los asistentes consumieron en torno a 2.300 botellas de espumoso, que degustaron con productos gastronómicos propios de toda la zona de la denominación de origen. Desde marisco de O Grove hasta lamprea rellena del Miño. Según la organización los productos que más se degustaron con los vinos fueron las navajas a la plancha, pero también se vendieron gran cantidad de filloas, requesón y bombones de albariño.