Pese a la creencia popular, es mejor estar solo que acompañado ante una situación incontrolable que genera sensación de desamparo, según demuestra un estudio de la Universidad de Haifa, en el norte de Israel, hecho público hoy

El experimento fue efectuado con ratas de laboratorio que, para sorpresa de los investigadores, aprendieron mejor a evitar las situaciones que provocan sentimiento de abandono cuando estaban solas que cuando estaban acompañadas, informó la Universidad en un comunicado.

Los roedores fueron sometidos por el científico Qutaiba Agbaria a ejercicios de "indefensión aprendida" ("learned helpessness", expresión acuñada por Seligman), como ligeras descargas eléctricas que en algunos casos son posibles de evitar y en otros no.

Agbaria comenzó su tesis doctoral a partir de la hipótesis de que las ratas aprenderían mejor a adaptarse a esa circunstancia en parejas, pero ésta pronto fue desmentida.

Después, los investigadores examinaron la influencia que tendría en un ratón que nunca había pasado por una de estas situaciones incontrolables y en uno que lo había hecho.

Estas parejas se adaptaron mejor al nuevo reto que las que ya habían sido sometidas a situaciones de desamparo, tanto solas como acompañadas.

Los científicos tampoco encontraron grandes diferencias de adaptación entre las "parejas mixtas" y las formadas por dos ratones que nunca habían vivido el experimento, lo que muestra que la "indefensión aprendida puede 'desaprenderse'", opina Agbaria.

"Ahora debemos seguir examinando si este cambio es resultado de la exposición a un ratón que no fue sometido al ejercicio del desamparo o a que el comportamiento social entre dos animales tiene otro significado", concluye el estudio.