Fueron los profesores de la menor quienes decidieron llevar a Urgencias a la niña, que es de origen extranjero y que ahora está bajo la tutela de la Dirección General de Atención a la Infancia, que depende de la Generalitat.

Según los primeros datos, la menor habría recibido varios latigazos de forma continua en la pierna con el tubo de goma de la conducción del gas butano.

Al constatar las lesiones, que le dificultan el movimiento de la pierna, los maestros la llevaron al Hospital, donde fue sometida a un examen médico y forense que dictaminó que las heridas serían compatibles con supuestos malos tratos.