"Si todo va según lo previsto, la vacuna contra la malaria estará lista para ser distribuida por países en vías de desarrollo a finales de esta década", dijo hoy Betuele Siguaque, coordinador del CISM, situado a 70 kilómetros al norte de Maputo.

Este centro es uno de los más importantes de Africa en el área de investigación para salud y el primero que ha demostrado la eficacia de una vacuna experimental contra la malaria, la primera causa de mortalidad de los menores de cinco años en Africa subsahariana.

Siguaque explicó que la vacuna se probará en 220 niños recién nacidos de la localidad de Josina Machel (distrito de Manhica) y agregó que ahora están reuniendo al mayor número de familias que se presten a colaborar.

Este es el segundo estudio llevado a cabo por el CISM tras el realizado en 2002, en el que se consiguió como resultado una vacuna con una eficacia de 6 meses.

"En este momento estamos intentando conseguir una vacuna con una eficacia más a largo plazo", comentó el coordinador del CISM.

El CISM junto con GlaxoSmithKline (GSK) Biologicals, el Hospital Clínico de la Universidad de Barcelona, y la Iniciativa para la Vacuna contra la Malaria (MVI, en inglés) del Programa para una Tecnología Adecuada en Salud (PATH) han presentado nuevos datos sobre la eficacia de la vacuna de GSK Biologicals: el RTS,S/AS02A.

Se realizó un seguimiento de seguridad, inmunogeneicidad y eficacia de 1.442 niños que habían recibido un régimen de tres únicas dosis de la vacuna en el año 2003.

Durante los 18 meses siguientes, el RTS,S/AS02A demostró reducir los episodios de malaria clínica en un 35 por ciento y los episodios severos en un 49 por ciento.

El funcionamiento del CISM está financiado en un 40 por ciento con fondos de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI), que además desembolsará cerca de un millón de euros en la ampliación de un hospital para albergar enfermos de malaria anexionado al CISM.