Antes incluso de recibir el primer negativo microbiológico, el mensaje de la Xunta era de absoluta tranquilidad. El primero en pronunciarse fue el nuevo conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, que desde primera hora insistió en que "el protocolo ha funcionado muy bien" y se comprometía a facilitar "información total y completa". Asistió con normalidad al pleno del Parlamento en Santiago y aprovechó para "felicitar a los profesionales del Chuac, del Chuvi y del 061".

En esta misma línea se pronunció el presidente de la Xunta, que agradeció el trabajo de los profesionales y destacó que se "estuvo trabajando toda la noche" en A Coruña. De nuevo destacó que el traslado e ingreso en Vigo se había realizado "de acuerdo a los protocolos previstos". En representación del Gobierno central fue el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, el encargado de pedir "prudencia" ante el posible caso de ébola en Galicia y defendió la prudencia que "siempre" muestra el Gobierno, mencionando las docenas de falsos positivos que luego se descartaron.

El alcalde de Vigo fue informado de la situación a primera hora del miércoles por el conselleiro de Sanidade y Abel Cablaleo le trasladó la "cooperación leal" del Ayuntamiento por si fuera necesario prestarles apoyo durante los días en que esté activo el protocolo.