El saxofonista y flautista Jorge Pardo, una de las figuras del jazz español con mayor proyección internacional, obtuvo ayer el Premio Nacional de las Músicas Actuales 2015, un galardón que, dotado con 30.000 euros, concede anualmente el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. El jurado del premio destacó la capacidad de Pardo para establecer puentes entre la tradición hispana, sobre todo flamenca, con otras músicas del mundo, y el magisterio que supone para las nuevas generaciones de músicos.

Pardo explicó ayer como "la libertad de formas, de expresión y de improvisación" del jazz unido al sentimiento del flamenco ha sido el "sello constante" de su música. "Me siento muy orgulloso de que los compañeros se acuerden de mí y de las cosas que vas haciendo", indicó Pardo sobre la concesión de este premio. "Son muchos años trabajando en el filo de la navaja del flamenco sin ser ni guitarrista, bailaor o cantaor", recalcó Pardo, que señala que pertenece a una generación de músicos entre los que citó a Carles Benavent.

En su fallo, el jurado otorgó por mayoría este premio a Pardo en reconocimiento a su talento como intérprete y compositor y por su capacidad "para convertir el instrumento en voz poética".

Lenguaje mestizo

Pardo (Madrid, 1956), intérprete de saxofón y flauta, tenor y soprano, emplea un lenguaje mestizo entre el jazz de raíz y el flamenco. Comenzó sus estudios musicales a los 14 años en el Real Conservatorio de Madrid y desde el principio se sintió atraído por el jazz.

Después de empezar a tocar con algunos músicos profesionales, como el pianista Jean-Luc Vallet, el baterista Peer Wyboris, Tete Montoliu, el organista Lou Bennett, formó junto a Pedro Ruy Blas el grupo Dolores, referencia en el panorama español.