Galicia hizo los deberes hace tres años para fomentar las donaciones de córnea y ahora es un referente a nivel estatal en el trasplante de tejido ocular. Mientras algunas comunidades se ven obligadas a pedir córneas a otras autonomías para poder hacer frente a la demanda de operaciones en su territorio, Galicia no sólo obtiene suficientes tejidos como para atender a todos sus pacientes sin apenas lista de espera sino que este verano incluso tuvo excedente de córneas, lo que le permitió ayudar a otras autonomías con déficit, según explicó ayer el jefe de servicios médicos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), Gregorio Garrido, en la XXX Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplantes.

La última jornada de este congreso sirvió para apreciar las grandes diferencias que existen entre las comunidades en el área de trasplante de córnea. Una encuesta de la ONT revela que tanto la detección del donante, como la extracción de los tejidos o el modo en el que se implantan varían de una a otra comunidad, lo que repercute en el número final de trasplantes realizados. En esta clasificación, Galicia se encuentra en muy buena posición y sus cifras no dejan de mejorar. "Desde enero y hasta el 1 de octubre se realizaron 158 trasplantes de córnea en toda la comunidad, lo que supone un 60% más que el mismo periodo de 2014, cuando hubo 97", explicó el coordinador de trasplantes de Galicia, Jacinto Sánchez, quien resaltó que algunos hospitales "han duplicado el número de trasplantes" en los últimos doce meses.

El incremento en el número de operaciones se traduce en una reducción progresiva de la lista de espera. "Si en el año 2012 había más de 220 personas a la espera, hoy en día son menos de 80 y en algunos hospitales como el Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) apenas hay lista de espera; son tres o cuatro personas y en un plazo mínimo de quince días son trasplantados", sostiene Sánchez, quien asegura que "en los casos de urgencias, la espera es cero".

Banco de córneas

La situación de Galicia, sin embargo, no siempre fue tan positiva sino que dió un giro de 180 grados en 2012. "Hasta entonces, sólo se recogían las córneas de los fallecidos que eran también donantes de órganos. Vimos que no era suficiente para cubrir la lista de espera que superaba los 220 pacientes", señala Sánchez, quien explica que el Sergas decidió entonces poner en marcha un programa específico para aumentar la donación de córneas. A ello se unió la creación de un único y centralizado banco de córneas en 2014, ubicado en el Chuac. Desde entonces las córneas donadas en Galicia se trasladan hasta A Coruña donde se analiza su calidad y se clasifican para su posterior traslado a los centros gallegos que lo demanden (realizan este tipo de trasplantes los hospitales de A Coruña, Santiago, Lugo, Vigo, Pontevedra y Ourense).

Las diferencias entre comunidades radican principalmente en la falta de un protocolo unitario para llevar adelante este tipo de operaciones. "No es lo mismo hacer como se hace en Galicia, extraer las córneas de donantes a corazón parado que simplemente de fallecidos que puedan donar el resto de sus órganos", explicó Garrido, quien recordó que en función de cómo se corten las córneas "de un donante pueden realizarse cuatro trasplantes". Además, la tecnología disponible en los bancos de tejidos también tiene mucho que ver con la eficacia o no a la hora de trasplantar. "Las córneas tienen que tener un número determinado de células para poder ser trasplantadas y el número de células desciende con la edad. Los bancos que no disponen del microoscopio necesario para ver la cantidad de células ya no recogen de donantes mayores, es decir, descartan algunas que sí podrían ser trasplantadas", señaló Garrido, quien recordó que en España hay cerca de mil pacientes a la espera de recibir una córnea