El Rey Felipe VI recinió ayer de manos del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, las credenciales que lo ratifican como primer embajador de honor vitalicio del Camino de Santiago, una "vía universal" cuyos "más genuinos valores", entre los que ha destacado su capacidad de "unir" y de "sumar", seguirá "impulsando" la Corona.

En un acto institucional en el compostelano Pazo de Raxoi, que arrancó pasadas las 11.15 horas de ayer, Felipe VI ha proclamado que el Camino de Santiago es "el Camino de Galicia, de España y de Europa". "Contad siempre con la Corona para seguir impulsando sus más genuinos valores", prometió, agradecido por la distinción.

De hecho, ha trasladado que al respaldar el Camino y sus valores en todas las ocasiones que están "a su alcance", solo cumple con su obligación "como Rey y como español". Una acción que acomete "con devoción y con el orgullo de quien sabe que este patrimonio que España ofrece al mundo".

"Esta vía de solidaridad y de paz es apreciada por ciudadanos de todas las naciones como el Patrimonio de la Humanidad que es, con toda justicia", sentenció, con la convicción de que el Camino es "muchas cosas: historia, cultura, arte y geografía". Pero, sobre todo, "son valores" y "una clara manifestación de fe cristiana para el creyente".

"Sinto que Galicia me agasalla con este xesto que, ademais, pon de relevo os vínculos milenarios da Coroa co Camiño e con esta prezada terra galega", resaltó su majestad.