El presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), Miguel Ángel Cadenas, ha considerado que el caso de Andrea, la niña de 12 años con una enfermedad degenerativa e irreversible cuyos padres han solicitado una muerta digna, exige valorar si se trata de una enferma terminal.

A preguntas de los periodistas, ha confirmado también que "la resolución va a ser pronta" y que se producirá una vez que concluyan los "trámites ordenados", después de que el titular del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Santiago, Roberto Soto, haya pedido al Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga) que realice un reconocimiento judicial y forense de Andrea.

Preguntado por la autorización judicial, en julio, al plan terapéutico que los médicos aplicaron entonces a Andrea, Cadenas ha dicho que "seguramente" lo que se resolvió entonces no sea "válido para ahora". "Porque han cambiado los presupuestos fundamentales de la intervención médica", ha apostillado.

Con todo, ha recalcado que solo puede hablar "relativamente" del caso por estar "judicializado" y por no tener un conocimiento directo del mismo.

Así, sobre la primera vez que el caso llegó al juzgado, ha dicho que lo que sabe es "que estaba en juego el consentimiento y el tratamiento de un enfermo menor y no sé si en aquellas fechas tenía capacidad para decidir".

Esta mañana, el magistrado del Juzgado de Familia de Santiago, Roberto Soto, dictó una providencia por la que solicita al Sergas que remita la documentación pertinente sobre el caso de Andrea, la niña de Noia con una enfermedad degenerativa grave cuyos padres solicitan su muerte digna.

En el auto elaborado ayer, el juez solicitaba al Sergas que le enviase esta mañana el historial clínico de la paciente, el informe del Comité de Ética Asistencial elaborado en septiembre, y un informe del Jefe de Servicio de Pediatría del CHUS donde se detallen los criterios por los cuales estiman que la menor no se encuentra en situación terminal ni pacede sufrimiento.

Así mismo, establece para hoy el examen de dicha documentación y el reconocimiento médico de la joven en el Imelga para determinar si su estado es terminal, si sufre dolor y si las medidas de soporte vital aplicadas suponen una "prolongación innecesaria" de la vida de la pequeña.

Una vez finalizadas estas pruebas, el juez se reunirá con los padres de la niña, Antonio Lago y Estela Ordóñez.