El jurado del Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2015, integrado por los patronos de la Fundación que da nombre a estos galardones, inició ayer las deliberaciones para decidir el ganador entre las veintisiete candidaturas que se han presentado en esta XXX edición. El fallo de este premio, último de los ocho galardones internacionales que convoca anualmente la Fundación Princesa de Asturias, será dado a conocer hoy al mediodía desde el Hotel de la Reconquista de Oviedo.

El jurado no se ha pronunciado sobre los candidatos que cuentan con más posibilidades de hacerse con el galardón. El Premio Princesa de Asturias de la Concordia está destinado a reconocer a aquellos cuya labor haya contribuido "de forma relevante a la defensa de los derechos humanos, al fomento de la paz, de la libertad, de la solidaridad, de la protección del patrimonio y, en general, al progreso y entendimiento de la humanidad".

En esta ocasión se han presentado candidaturas desde Alemania, Argentina, Colombia, Dinamarca, Emiratos Árabes, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irak, Irlanda, Italia, Jordania, Líbano, Lituania, México, Nueva Zelanda, Países Bajos, Paraguay, Perú, Polonia, Portugal, Rumanía, Tailandia y España. En esta edición han sido galardonados con el Princesa de Asturias de las Artes, el cineasta estadounidense Francis Ford Coppola; con el de Ciencias Sociales, la economista franco-estadounidense Esther Duflo; y con el de Comunicación y Humanidades, el filósofo español Emilio Lledó Íñigo. El premio de Investigación Científica y Técnica galardonó a las bioquímicas Emmanuelle Charpentier (Francia) y Jennifer Doudna (Estados Unidos); el de los Deportes, a los baloncestistas españoles Pau y Marc Gasol; el de las Letras, al escritor cubano-español Leonardo Padura, y el de Cooperación Internacional, a la enciclopedia digital de acceso libre, Wikipedia. El de la Concordía recayó en la última edición en la periodista congoleña Caddy Adzuba (2014), y en años anteriores en la ONCE, el Banco de Alimentos, los Héroes de Fukushima, Manos Unidas y la ciudad de Berlín, entre otros.