Una carta "espléndida" dirigida a Castelao, poniéndose a su disposición cuando es desterrado a Extremadura; varias conversaciones epistolares con fino humor entre él y Álvaro Cunqueiro; ríos de tinta en confidencias a Luís Seoane e incluso y a pesar de la diferencia de edad entre ambos, a Isaac Díaz Pardo; o una felicitación ilustrada -y dibujada de su puño- que dedica a García Lorca por éxito del estreno de "Bodas de sangre" son algunos de los legados inéditos del pintor Carlos Maside. Escritos que explican porqués de su vida y ponen letra a su "exilio interior" salen a la luz ahora en un libro que recopila hasta 179 cartas, manuscritos y tres fotos, casi todas desconocidas hasta la fecha, y que estaban en el archivo de los herederos.
"Son documentos que consolidan a este libro como un libro de historia contemplada desde Galicia; ilustran a la perfección la historia de la segunda mitad del siglo XX", destaca la catedrática de Historia María Esther Rodríguez, que reunió y transcribió toda esa correspondencia y trabajó con el catedrático de Filoloxía Galega Anxo Tarrío, coordinador de la edición y con el director de la editorial Alvarellos, Henrique Alvarellos. El libro "Correspondencia (1928-1958). Cartas inéditas e dispersas. Carlos Maside" incluye también varias fotografías inéditas, de sus estudios de Artes en Santiago y una fotografía de finales de los años 20. Las cartas originales estaban manuscritas y en algunos casos mecanografiadas y proceden en gran parte del archivo de los herederos del autor.
Carlos Maside (Pontecesures 1897- Santiago 1958) mantuvo, durante toda su vida, una rica y continuada relación epistolar con buena parte de la intelectualidad gallega de su tiempo, y la del exilio. El volumen documentos inéditas, desde 1928 hasta 1958. Los contenidos están muy marcados por la Guerra Civil y la larga represión posterior. Iluminan un período de treinta años de relación entre amigos y personalidades nacidas alrededor de 1900.
Generación de intelectuales
La publicación reúne cartas a Luís Seoane, Castelao, Federico García Lorca, Bal y Gay, Otero Pedrayo, Isaac Díaz Pardo, Cunqueiro, Paz Andrade, Fernández del Riego, Laxeiro, Manuel María o Ánxel Fole. Recoge la correspondencia de ida, y muchas veces también la de vuelta, entre la que destaca el fecundo y prolongado intercambio epistolar con Luís Seoane.
"Le escriben y él contesta", añade Esther Rodríguez, "Dieste, Seoane y Díaz Pardo se ven como personas de su confianza, por la gran confidencialidad que muestra las cartas", asegura. "Hay una carta impresionante, inédita, que escribe desde Madrid el también pintor Arturo Souto en el año 1935 por la dureza y la dificultad del mundo del arte. Muestra la situación social de la época".
En el caso de Bal y Gay, según explica la experta, las cartas estuvieron atesoradas durante varias décadas en México y luego, 40 años después, el autor las entregó a una fundación. Y con Otero Pedrayo, las misivas muestran "cariño y bonhomía" recíproca.
El volumen se completa con la incorporación de fotografías, ilustraciones y manuscritos que nunca antes habían visto la luz.
"Era de justicia publicar estas cartas, porque realmente esta correspondencia significa rehabilitar la figura de Carlos Maside y la de toda su generación: muchos científicos, pintores, poetas, músicos, filósofos o escultores, la mayoría republicanos que se autodefinían como cívicos, laicos y demócratas. Así que representan la democracia y era preciso hacer un desagravio de ellos luego del largo tiempo de ostracismo al que estuvieron sometidos por el devenir político, tras la derrota de la II República", asegura Esther Rodríguez.
"Eran una generación muy formada, un grupo de intelectuales irrepetibles con un nivel de excelencia semejante al de cualquier grupo de Europa de la época".
