Eduard Estivill, director de la Unidad de Alteraciones del Sueño del Hospital General de Catalunya, aludió a un estudio científico que está a punto de publicarse para asegurar que "el feto no oye a la mamá: en la barriga el ruido es de 80 decibelios, como el cruce de mayor tráfico de una ciudad". El sonido del corazón del bebé -170 latidos por minuto- y el de su madre, en la impresionante caja de resonancia que forma el vientre materno, impiden que el bebé reaccione a estímulo sonoro alguno, da igual si es música de Beethoven, de AC/DC o la simple voz de su madre. "Es poco romántico, pero es ciencia", destacó.

TDAH

Ya durante el coloquio, preguntado por el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), Estivill dijo que existe, que está descrito médicamente, pero que "no todos los niños que están catalogados como tales lo padecen. Si no tienes un niño así en tu familia, no eres fashion", ironizó.

Explicó que algunos de estos niños, que antes eran calificados como "niños nerviosos", pueden tener el "síndrome de piernas inquietas": cuando están quietos sienten un hormigueo que desaparece cuando se levantan. No debe confundirse con la "sacudida del adormecimiento", esa especie de espasmo muscular que sentimos a veces cuando nos estamos quedando dormidos, y que es totalmente normal. Según Eduard Estivill, el síndrome de las piernas inquietas afecta aproximadamente al 10 por ciento de la población y puede estar relacionado con la falta de hierro y con una posible alteración del neurotransmisor dopamina.