La playa nigranense de Patos sufrió ayer una nueva marea roja, la misma que cada año por estas fechas protagonizan decenas de aficionados al surf que, desafiando al frío, se enfrentan al oleaje vestidos de Papá Noel convocados por el Patos Surf Club, que traslada así a Galicia un rito de bienvenida a la Navidad de los surfistas australianos.
La iniciativa -ya tradición en Nigrán después de ocho ediciones- logró congregar ayer a más de un centenar de personas en el arenal. Dispuestas a lanzarse al agua, se enfundaron en trajes de licra rojos con sus correspondientes gorros y sin perder tiempo se aferraron a sus tablas para disfrutar de las olas.
Todo el material fue proporcionado a los asistentes de forma gratuita por la organización, que tras el chapuzón sirvió entre los participantes chocolate caliente y dulces típicos navideños.
A la jornada festiva en la playa nigranense de Patos también se sumó el Prado Surf Club, cuyos alumnos surfearon igualmente ataviados como Santa Claus y participaron en un brindis navideño.
Sin embargo, la invasión de papanoeles en el Val Miñor también llegó por carretera gracias a la iniciativa de la peña motera Os Rillasepas, que por la tarde reunió en la plaza de San Benito, en Gondomar, a más de 400 papanoeles sobre dos ruedas.
Allí realizaron una recogida de alimentos destinados a las familias con menos recursos de la localidad, para, posteriormente, hacer una ruta por la comarca que terminó en torno a las seis de tarde en Gondomar con una degustación de chocolate con rosquillas.
