Vigo acogió ayer el estreno de la obra "Laberinto azul (I). Poemario Vindel", que el compositor vigués Juan Eiras creó basándose en el documento original de Martín Códax y que convirtió en una sinfonía contemporánean en la que se mezclaron el sonido de la orquesta Vigo 430, con música electrónica y voces de dos cantantes. "Tengo un sentimiento de orgullo y de gratitud enorme por haberme encargado esta obra. Y también siento la responsabilidad que supone basarse en un documento de culto", aseguró a FARO el compositor momentos antes de subirse al escenario.
Se trata de un homenaje auspiciado por el Concello de Vigo, que encargó una interpretación musical para conmemorar el centenario del hallazgo del llamado "Pergamino Vindel" con un concierto de la Orquesta Vigo 430.
La primera interpretación de la esta pieza duró doce minutos y provocó el deleite de los asistentes. El autor introdujo el sonido del mar, como nexo común con Códax, con música grabada y sintetizada que se proyectó sobre los instrumentos, algunos de los cuales también imitó los golpes de aire del océano. La sonoridad de la obra, "muy plástica", deja percibir "claramente las olas", según los propios intépretes. Cuadros sonoros de gran belleza completaron una pieza muy nostálgica y con un grado alto de dificultad para las voces, con muchos matices y texturas. El concierto supuso el estreno de la nueva temporada de la Vigo 430, así como su introducción en la música contemporánea.
Y desde Alicante llegó el director invitado que llevaría la batuta, el profesor de clarinete Gonzalo Berná -que en el 2009 fue seleccionado como director de la Joven Orquesta Nacional de España y, como músico, actuó en las principales salas europeas como miembro de la Orquesta de Jóvenes Gustav-Mahler y la del Festival Schleswig-Holstein-. El director calificó de "reto" el estreno de la obra de Eiras, que "va más allá de las sonoridades convencionales en busca de otras nuevas". "Es una obra complicada para una orquesta que no está acostumbrada a un lenguaje moderno, porque requiere cierta técnica de efectos sonoros", argumentó.
Del texto de las cantigas, Eiras eligió palabras conceptuales, que fueron entonadas por el barítono ourensano Eliseu Mera y la soprano viguesa Beatriz Riobó.
El programa musical, que se celbró sobre el escenario del Centro Cultural Afundación, se extendió durante una hora y media y se completó con un "Concierto para viola", de Franz Antón Hoffmeister. t, como solista, la navarra Isabel Villanueva.
