La noticia de que Rusia ha autorizado la firma del convenio de colaboración sobre adopciones con España -país que ya lo había aprobado el pasado mes de diciembre- y que fija los requisitos de las adopciones de menores rusos por parte de familias españolas, abre una nueva etapa en Galicia, donde se han adoptado 180 menores rusos desde el año 2000.

La Federación Rusa es el cuarto país en orden de importancia de adopciones internacionales en Galicia desde hace trece años, solo por detrás de Etiopía, con 807 niños adoptados; China, con 654 y Colombia, con 308 desde el año 2000, según datos de la Consellería de Benestar. En España hay unos 12.000 menores rusos adoptados.

España será el primer país que llega a un acuerdo con Rusia sobre el texto del convenio de adopciones, a raíz de la modificación legislativa del Código de Familia ruso, realizada en julio de 2013. Entonces, Rusia exigió la existencia de un convenio bilateral para poder continuar tramitando adopciones, al hacer una modificación legislativa del Código de Familia ruso. Comenzó una particular incertidumbre para medio millar de familias en España que habían iniciado los trámites y que vieron paralizado su expediente hasta que Madrid y Moscú ratifiquen ese convenio bilateral. Pero también la suspensión de los procesos judiciales afectó a unas 150 familias a las que ya se había asignado un menor. Ninguna de ellas en Galicia.

El 29 de agosto, el Tribunal Supremo ruso emitió una instrucción por la cual se paralizaron los juicios de las parejas procedentes de estados en los que se permite el matrimonio homosexual hasta que estos países firmen convenios bilaterales con Moscú en la materia.

Galicia recomendó entonces -aunque no paralizó- que no se emprendiesen más solicitudes mientras dicha adopción internacional no gozase de más garantías jurídicas. Así lo reconocen desde la Xunta y la dirección de AIIM en Cataluña, entidad acreditada para gestionar la adopción con Rusia que trabaja en Galicia.

La razón de fondo que se ha apuntado es que Rusia trata de endurecer los requisitos, para impedir que sus menores fueran adoptados por familias monoparentales u homosexuales. Los países que quisieran seguir siendo "adoptantes" debían firmar un convenio bilateral. España se dio prisa en redactar las reglas del juego y a día de hoy sólo queda que ambos países se sienten a firmar.

Tras meses de intensa negociación, el Gobierno a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, logró que este país diera luz verde al acuerdo. Finalmente, el primer ministro ruso, Dimitri Medvedev, ha autorizado la firma del convenio.

Los requisitos para los adoptantes que, por el momento, ha avanzado Benestar sobre las adopciones con Rusia -tal y como consta en la web- es que la pareja debe estar casada, ser mayor de 25 años (ambos cónyuges) y es necesario acreditar una formación en adopción. "No se admite la adopción por parejas de hecho, monoparentales ni por cónyuges del mismo sexo", aseguran. También se excluyen del proceso adoptivo las personas con varias enfermedades crónicas o minusvalías severas.

Desde la Entidad Colaboradora de Adopción Internacional (ECAI) AAIM -la entidad acreditada en Galicia para tramitar solicitudes de adopción a la Federación Rusa- aseguran que los trámites para solicitar la adopción con Rusia se elevan a unos 19.000 euros, debido a la numerosa documentación requerida .