Las campañas para movilizar a las redes sociales en la búsqueda de un donante que logre sanar a una persona, generalmente a un niño, son habituales y, muchas veces, consiguen un número elevado de voluntarios. Sin embargo, la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) advierte de que ésta no es la manera adecuada de actuar y que puede dar lugar a problemas posteriores. Por ello, esta es una de las prohibiciones que incorpora la regulación sobre el procedimiento de donación de células y tejidos humanos, publicada el miércoles en el BOE y que, según destaca el director de la ONT, Rafael Matesanz, busca reforzar el carácter "universal" de las mismas.

La prohibición de estos llamamientos personalizados -el más reciente el de "Una médula para Mateo", que logró un aluvión de solicitudes para convertirse en donante y que contó con el apoyo de un buen número de famosos- no es totalmente comprendida por las familias que pasan o han pasado por este proceso. Este es el caso de Juan Antonio González, un nigranés padre de un niño con anemia de Fanconi que, hace dos años, logró un donante compatible procedente de Hawai. "Es casi imposible que se encuentre un donante compatible con un llamamiento de este tipo, pero sí es una buena forma de concienciar y sensibilizar a la sociedad de la necesidad de donantes y, quizás, aunque no se encuentre a alguien para ayudar a Mateo sí se encuentre a un donante para Manuel, Michel o Ricardo; son campañas personalizadas pero en realidad ayudan a todos, por eso en principio no parecen perjudiciales", opina el padre.

Juan apunta también a que acciones de este tipo "ayudan a los propios padres a sentir que siguen luchando y eso, moralmente, es una gran ayuda. En nuestro caso la opción fue invertir todos nuestros ahorros en viajar a Estados Unidos en busca de una solución que, finalmente, llegó desde Hawai; yo creo que todas las campañas son buenas siempre que no se caiga en el populismo", añade.

El 70% de los pacientes que necesitan un trasplante de médula ósea, tratamiento con el que se curan enfermedades como la leucemia, no tienen un donante familiar, por lo que precisan de uno voluntario con un alto grado de compatibilidad. Campañas como la de Mateo consiguieron un aluvión de donantes que, en principio, solo entran en el Registro Nacional de Donantes y, si aparece un paciente compatible, se le solicitaría la donación. "Al final lo que importa es que las campañas animan a muchos a dar el primer paso para convertirse en donantes y, después, puede que ayuden a alguien de cualquier parte del mundo, por lo que mantiene su carácter altruista y general y al final es algo positivo", destaca Juan.

Aunque la ONT reconoce que es difícil saber la relación causa-efecto de un llamamiento personalizado en cuanto al número de donantes de médulas conseguidos, las cifras indican que se ha pasado de los cerca de 6.000 donantes de hace una década a los 30.000 del año pasado.

También los datos indican este aumento de donantes de médula en Galicia, donde en los primeros ochos meses de 2013 se realizaron un total de 25 trasplantes de médula de un donante no familiar, lo que supone un aumento del 32% con respecto al mismo periodo del año 2012, cuando entre enero y agosto se realizaron 19 trasplantes de este tipo.

En Galicia se realizan trasplantes de médula ósea desde el año 1992, con un registro total de cerca de 2.200 trasplantes. De ellos, más de 1.800 fueron de tipo autólogo, más de 250 alogénicos emparentados y 140 alogénicos no emparentados.