Carmen Díez de Rivera, la musa de la Transición, vivió una tragedia que nunca superó al conocer que el hombre con el que se iba a casar era su hermanastro. No pudo perdonar a su madre, a la que veía como una pecadora, asegura la periodista y escritora Nieves Herrero, quien acaba de publicar su primera novela histórica: Lo que escondían sus ojos. En el libro desempolva el amor adúltero de Ramón Serrano Súñer, cuñado de Francisco Franco, con la guapísima marquesa de Llanzol, Sonsoles de Icaza. De esta pasión de postguerra nació en Madrid la bastarda Carmen. Fue el final de la brillante carrera política del cuñadísimo. Corría l año 1942. Herrero atiende en exclusiva a EPI Press en una jornada maratoniana que comienza de camino al Hospital Quirón de la capital. Su marido sufre un cólico nefrítico, pero la que fuera chica Hermida no se deja amilanar por este contratiempo y mantiene su agenda. "Este libro me da la vida", proclama llena de energía mientras conduce su coche. Por la tarde, Nieves Herrero aún tendrá que preparar la promoción de su espacio en 13 TV. No pierde la dulzura ni al rememorar uno de los capítulos más amargos de su vida: el programa que grabó en 1993 sobre el crimen de Alcácer que suscitó un duro debate sobre los límites de la ética periodística. "Fue un error", se sincera la madrileña.