Un nuevo estudio vuelve a mostrar el lado más peligroso de internet. Los adolescentes españoles de entre 12 y 18 años reciben propuestas sexuales a través de la red o de sms, y peticiones de fotografías comprometidas, al mismo tiempo que reconocen facilitar información personal tanto propia como de sus familias en foros, redes sociales y chats. Así lo constanta el estudio de ámbito nacional sobre el uso de internet y las redes sociales de los adolescentes españoles (de 12 a 18 años) "Retos ético-pedagógicos en entornos virtuales. Análisis de la realidad y propuestas educativas", realizado por el Grupo de Investigación de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) "El quehacer educativo como acción" durante el curso académico 2012-2013.
Según este informe, uno de cada tres jóvenes españoles de entre 12 y 18 años ha tenido propuestas de carácter sexual por internet, uno de cada cinco ha recibido alguna petición de una fotografía comprometida -que aumenta a casi uno de cada dos en los nacidos en 1995- y uno de cada cuatro jóvenes de 18 años ha enviado alguna imagen de este tipo.
El porcentaje sobre ciberacoso, según los autores del estudio, es "aún más alarmante" si se observa el reducido número de adolescentes que acudiría a sus padres en tal situación: un 15,7%. Quienes obtienen mejores notas son más propensos a acudir a sus progenitores (24,4%), frente a los que tienen una media inferior a 5 (9,6%). "Esto nos lleva a identificar en este grupo el mayor colectivo de riesgo", añaden.
Los autores de esta investigación ponen especial énfasis en las propuestas sexuales a través de las nuevas tecnologías y aseguran que es más habitual de lo que se cree: "Tampoco es baladí el porcentaje de quienes han recibido propuestas de carácter sexual por correo electrónico, sms, foro o chat, pues en términos generales supera a las peticiones de fotos comprometidas y alcanza el 28,8%; es decir, prácticamente 1 de cada 3 jóvenes españoles de entre 12 y 18 años".
Asimismo, el 34,2% de los adolescentes afirma que cuenta cosas de ellos mismos o de su familia en internet. Según la investigación, más de la mitad de los adolescentes (el 55,1%) admite que o bien no ha pensado o bien no considera probable que lo que escribe en la red tenga consecuencias para el futuro.
"Internet y más directamente las redes sociales están difuminando las líneas de la intimidad; la posibilidad de compartirlo prácticamente todo dificulta a los adolescentes la comprensión de lo que debe compartirse con amigos, familiares, conocidos, así como la delimitación de ámbitos: laboral, escolar, social, familiar, público y privado, y la diferenciación de lo sustancial de lo accesorio", afirman los autores del estudio.
Visualización compartida
"Si los expertos tradicionalmente han recomendado la visualización compartida y comentada de la televisión en el entorno familiar, este requerimiento se nos muestra hoy más imprescindible aún si cabe. A pesar de ello, la realidad nos muestra el escaso acompañamiento que los padres realizan de la navegación y las relaciones sociales virtuales de sus hijos", afirman los autores de este estudio, que dirige el catedrático de la UNIR, José Antonio Ibáñez-Martín.
De hecho, el estudio arroja que en el 57% de los casos los padres no tienen acceso al perfil de sus hijos. Otras variables manejadas por este grupo de investigación apuntan a que el 17% de jóvenes entre 12 y 18 años ha quedado con alguien a quien solo conocía a través de la red. Este porcentaje sube al 45,7% en jóvenes de 18 años.
