La cooperativa viguesa "O Cable Inglés" recibirá el sábado, Día do Cooperativismo Galego, el Premio a los valores cooperativos por su fomento de esta fórmula empresarial para atender las nuevas demandas sociales. En total se entregarán cuatro galardones. El de mejor proyecto cooperativo ha recaído en las sociedades Luscofusco (Santiago) y Xanela (Ourense), el de la promoción de esta fórmula empresarial, para la Mancomunidade Terra de Celanova y el concurso de iniciativas cooperativas, que es para Proxecto Coop (Ourense) y Val de Lourenzá (A Mariña). En Galicia existen un total de 1.152 cooperativas que agrupan a 90.158 socios y crean un total de 18.649 puestos de trabajo. "El cooperativismo es una buena fórmula en tiempos de crisis porque es flexible y justa", destacan las creadoras de O Cable Inglés, Marián Fernández, Cristina Labandeira, Nuria Pérez y Pilar Vera.

Las cuatro socias están "encantadas y sorprendidas" por el premio que han recibido ya que constituyeron la cooperativa cultural hace solo un año. "Ninguna nos encontrábamos cómodas en nuestro trabajo y encontramos en la cooperativa la mejor manera de poder dedicarnos a la cultura al tiempo que conciliar el trabajo con nuestra vida familiar", explican.

El objetivo de esta cooperativa es "proponer trajes culturales a medida: desde la creación a la producción, la búsqueda de financiación, la comunicación... todo lo necesario para llevar a buen término cada experiencia cultural", apuntan. Gracias a la experiencia que aporta cada una de las socias en las áreas de diseño, gestión, producción y comunicación, "podemos responder a demandas muy variadas que van desde la fotografía, al audiovisual, la ilustración, la animación, la música, las artes escénicas, la pedagogía, la traducción, la interpretación, la gastronomía o la moda", añaden.

Rescataron su nombre de uno de los episodios más desconocidos de la Historia de Galicia. "Comenzó en 1873, cuando la ETC Eastern Telegraph Company se instaló en la ciudad de Vigo para tender el primer cable telegráfico submarino que unía el continente europeo con el resto del mundo. Durante más de un siglo Vigo fue la puerta de entrada a Europa de todos los grandes acontecimientos internacionales. En las faldas del monte del Castro se instaló una comunidad británica que durante más de cien años transformó las dinámicas de la ciudad e hizo grandes aportaciones a nuestro patrimonio inmaterial", concluyen las premiadas.