Ángeles Caso se recuerda el 2 de enero del 2012, frente a una chimenea, a solas en una casa rural escribiendo esto: "Quiero mantener la libertad y el espíritu crítico por los que pago con gusto todo el precio que haya que pagar. Quiero toda la serenidad para sobrellevar el dolor y toda la alegría para disfrutar de lo bueno. Un instante de belleza a diario. Echar desesperadamente de menos a los que tengan que irse porque tuve la suerte de haberlos tenido a mi lado. No estar jamás de vuelta de nada. Seguir llorando cada vez que algo lo merezca, pero no quejarme de ninguna tontería. No convertirme nunca, nunca, en una mujer amargada, pase lo que pase. Y que el día en que me toque esfumarme, un puñadito de personas piensen que valió la pena que yo anduviera un rato por aquí. Solo quiero eso. Casi nada. O todo".

Así acaba el artículo "Lo que quiero ahora", publicado en el Magazine de FARO DE VIGO y por el que la periodista acaba de lograr, por unanimidad del jurado, el premio "Julio Camba", destinado a textos periodísticos en castellano y que este año alcanzó su 34 edición.

El fallo del premio para textos en castellano fue leído ayer en Pontevedra. Entre los patrocinadores de estos galardones están El Corte Inglés y Novacaixagalicia. Por su parte el premio "Fernández del Riego" para textos en gallego, en su décima edición, fue para Manuel Darriba (Sarria, 1973), por el artículo "Grises" publicado en "De luns a venres". Ambos recibirán un premio de 6.000 euros.

Ángeles Caso suscribe punto por punto aquello que escribió en soledad y silencio, "en un momento complicado, después de conocer las enfermedades muy graves de tres amigos". "Lo que quiero ahora" es un artículo sobre "las cosas verdaderamente importantes de la vida", que son "cosas pequeñas" que no tienen nada que ver con el poder, la influencia, el dinero o los laureles.

El artículo tiene su historia. Cuando se teclea en internet su título aparece un buen puñado de referencias. "Sigue dando vueltas por la red, una siempre piensa que escribe para un grupito de personas, pero nunca pude imaginar que este artículo creciera tanto como creció". A los lectores les encantó, mucho antes que a los miembros del jurado de "Julio Camba". "Posiblemente porque muchas personas están deseando oír y leer cosas sencillas, con sentido común. La voz que ellas no pueden tener".

De nuevo esa voz del artículo: "Y ahora, ahora, en este momento de mi vida, no quiero casi nada. Tan sólo la ternura de mi amor y la gloriosa compañía de mis amigos. Unas cuantas carcajadas y unas palabras de cariño antes de irme a la cama. El recuerdo dulce de mis muertos. Un par de árboles al otro lado de los cristales y un pedazo de cielo al que se asomen la luz y la noche. El mejor verso del mundo y la más hermosa de las músicas. Por lo demás, podría comer patatas cocidas y dormir en el suelo mientras mi conciencia esté tranquila".

Una reflexión que sirve para recordar que "las cosas importantes de la vida son muy poquitas, aunque no siempre fáciles de conseguir". Ángeles Caso ve árboles desde su casa, tiene quien le dé las buenas noches y con quien reír, "y toco madera" para que se mantenga la situación.

El premio la "emociona" y ese discurrir del artículo premiado, mucho más. "Hasta me llegó una vez rebotado por internet". La clave del éxito la explicaba ayer en Pontevedra el presidente del jurado, el escritor Alfredo Conde: "Habla sobre temas que tanto hoy como dentro de veinte años, estarán de actualidad". Se alegra Ángeles Caso de "poder expresar las cosas como las siento". Un lujo para los tiempos que corren.