El artista Otto Muehl, uno de los artistas austriacos más provocativos, que fue encarcelado por delito sexual contra menores en 1991, falleció el pasado domingo a los 87 años de edad.

El pintor era conocido principalmente por ser cofundador del Accionismo Vienés, un movimiento de vanguardia que causó la indignación por sus imágenes gráficas de sangre y de violencia, así como de cuerpos desnudos embadurnados en pintura.

Al igual que otros participantes de este movimiento (entre ellos, Guenter Brus, Hermann Nitsch y Rudolf Schwarzkogler), Muehl cumplió una corta condena en prisión en los años 60 por violar leyes de decoro.

Muehl fundó en los 70 la comuna Friedrichshof, en Viena, que atrajo a 600 residentes y que fue considerada por muchos una especie de secta autoritaria. El pintor fue condenado a siete años por la violación y abuso de algunos menores que vivían allí. Tras su puesta en libertad, en 1997, se trasladó a Portugal, donde vivió hasta su muerte.